Por el triunfo del Inmaculado Corazón de María

lunes, 27 de octubre de 2025

FÁTIMA Y LA GRAN APOSTASÍA

 


“La gran apostasía en la Iglesia comienza desde arriba”.

 

¿Qué es el Tercer Secreto de Fátima?

El Tercer Secreto completo no ha sido revelado por el Vaticano, pero incluso muchas almas que no practican su fe intuyen que es mucho más que simplemente el atentado contra el Papa Juan Pablo II o un relato latente de futuras ballestas en una colina del Vaticano.

En efecto, ningún católico está obligado a creer en el mensaje de la Santísima Virgen María a los tres niños de Aljustrel, pero es la reacción a ese mensaje por parte de altos prelados de la Iglesia lo que revela varios aspectos vitales de la actual Crisis de Fe en la Iglesia.

La conclusión que se extrae de su reacción no depende de que el mensaje de Fátima sea legítimo: todo lo que importa en este análisis es que los eclesiásticos en cuestión creen en él.

Y sin embargo, si evaluamos honestamente la manera en que estos líderes han actuado a la luz del mensaje de Fátima, podemos ver algo absolutamente asombroso: sus acciones pintan el mismo cuadro de apostasía que aparentemente está contenido en el Tercer Secreto completo de Fátima, el cual continúan ocultando.

Advertencias desoídas sobre la Gran Apostasía

Varios clérigos que afirmaron conocer el contenido del Tercer Secreto completo de Fátima han indicado que éste habla de una gran apostasía:

“En el Tercer Secreto se predice, entre otras cosas, que la gran apostasía en la Iglesia comienza desde arriba.”

(Cardenal Luigi Ciappi, citado en The Secret Still Hidden de Christopher Ferrara, p. 43)

“Estoy preocupado por los mensajes de la Santísima Virgen a la pequeña Lucía de Fátima. Esta insistencia de María sobre los peligros que amenazan a la Iglesia es una advertencia divina contra el suicidio de alterar la fe, en su liturgia, su teología y su alma... Oigo a mi alrededor a innovadores que desean desmantelar la Capilla Sagrada, destruir la llama universal de la Iglesia, rechazar sus ornamentos y hacerle sentir remordimiento por su pasado histórico.”

(Cardenal Eugenio Pacelli, el futuro Pío XII, The Secret Still Hidden, p. 31)

“[El Tercer Secreto] no tiene nada que ver con Gorbachov. La Santísima Virgen nos alertaba contra la apostasía en la Iglesia.”

(Cardenal Silvio Oddi, The Secret Still Hidden, p. 42)

“Si ‘en Portugal el dogma de la Fe siempre se conservará’... se puede deducir claramente de ello que en otras partes de la Iglesia esos dogmas llegarán a volverse oscuros o incluso a perderse por completo. Así, es muy posible que en este período intermedio al que se alude (después de 1960 y antes del triunfo del Inmaculado Corazón de María), el texto haga referencias concretas a la crisis de la Fe en la Iglesia y a la negligencia de los mismos pastores...”

(Padre Joaquín Alonso, The Secret Still Hidden, p. 35)

Estos clérigos no tendrían ninguna razón para mentir acerca de una gran apostasía en la Iglesia.

Por otro lado, aquellos que supervisan una situación tan catastrófica —especialmente los papas reinantes— serían obviamente muy reacios a revelar un mensaje que daría a conocer al mundo que estaban ignorando descaradamente la advertencia de la Santísima Virgen y llevando a la Iglesia por mal camino.

Todos ellos entendían perfectamente que las enseñanzas del Concilio Vaticano II eran una desviación radical de la Fe Católica tradicional.

A continuación, algunas conversaciones con el Padre Malachi Martin, quien había leído el Tercer Secreto de Fátima.

La primera entrevista fue con el Sr. Bernard Janzen, de Triumph Communications:

Janzen: En nuestra conversación anterior, usted apenas tocó el tema del asalto de Satanás al papado. Quizás podríamos tener una breve discusión sobre eso.

P. Martin: […] lo que creo que es fatalmente necesario que todo católico sepa, y eso es el destino del papado y la próxima tensión y peligro de que nos encontremos sin la fuerza del papado.

Janzen: ¿Es posible que los cardenales, en un futuro cónclave, pudieran elegir a un papa herético?

P. Martin: [breve pausa ante la naturaleza delicada de la pregunta] Sabes… en el pasado han elegido a hombres que tenían ideas heréticas. Dos o tres. Pero aún no han elegido a un apóstata. Un apóstata que se haya rebelado contra lo más fundamental de la fe y haya rechazado a Dios y a Cristo. Ahora tenemos apóstatas que son papabili [hombres que podrían ser elegidos papa]. Sí, podríamos tener un apóstata. Pero en ese día, entonces estaremos dentro de algo terrible. Estaremos dentro de algo que, Bernard, si lo piensas, con pleno conocimiento del significado de tus términos, es de pesadilla. Pondría a prueba la fe de Santa Catalina de Siena. Pondría a prueba la fe del más grande de los santos. Pondría a prueba la paciencia de Job. Sería un día negro; un día en el que podrías cubrir todas las ventanas de negro y apagar las luces y vestirte de saco y ceniza y rezar para ser perdonado, porque tu fe será hecha pedazos... si eso ocurre, porque entonces, ellos tienen el premio, y todo se va al subsuelo. Y estaríamos realmente en camino de convertirnos en lo que Pablo VI, en su miseria, llamó en 1978 una parte infinitesimalmente pequeña de la humanidad. Completamente marginados y apartados y olvidados como un grupo pintoresco de personas, tan interesantes como los astrólogos tibetanos en un campus moderno.

“El Reino de las Tinieblas”, 1992

 

Entrevista del P. Malachi Martin con Art Bell el 4 de mayo de 1998:

P. Martin: La profecía de Fátima no es un documento agradable de leer — no son buenas noticias. Implica —no tiene ningún sentido a menos que aceptemos que habrá, o que ya está en curso— una apostasía generalizada entre clérigos y laicos en la Iglesia Católica; que la organización institucional de la Iglesia Católica Romana —es decir, la organización de parroquias, diócesis, arzobispos y obispos y cardenales y las burocracias romanas y las cancillerías en todo el mundo—, a menos que eso sea totalmente destruido y reducido a nada, el Tercer Secreto no tiene sentido. Y, en segundo lugar, la otra característica destacada sobre él es que significa un sufrimiento intenso para los creyentes.

 

Entrevista del P. Malachi Martin con Art Bell el 13 de julio de 1998
(Aniversario del Tercer Secreto de Fátima):

Bell: Muy bien, aquí vamos. Solo un par de cosas que quiero leer rápidamente. Una de un amigo en Australia, que dice: “Un sacerdote jesuita me contó más sobre el tercer secreto de Fátima hace años en Perth. Dijo, entre otras cosas, que el último papa estaría bajo el control de Satanás. El Papa Juan se desmayó al pensar que podría ser él. Nos interrumpieron antes de que pudiera oír el resto.” ¿Algún comentario sobre eso?

P. Martin: Sí… eh… suena como si estuvieran leyendo —o se les estuviera diciendo— el texto del tercer secreto.

Bell: Oh, cielos.

P. Martin: Así lo parece. Pero es lo suficientemente vago como para hacer que uno vacile. Pero suena como eso.

Bell: Padre, ¿existe alguna circunstancia en la que pueda imaginar que se sentiría libre de revelar el secreto?

P. Martin: Sí. Sí. Si hubiera un colapso total en el centro.

Bell: Y usted anticipa eso, ¿no es así?

P. Martin: Lo anticipo como una posibilidad, Art. No puedo predecirlo, pero lo anticipo como una posibilidad, ciertamente, sí. Así es.

 

“El P. Martin me confirmó personalmente en 1997 que el papa que conducirá la apostasía en la Iglesia será un hereje y un antipapa.”

— P. Paul Kramer; Facebook; mayo de 2016

 

“La apostasía de la ciudad de Roma respecto del vicario de Cristo y su destrucción por el Anticristo pueden ser pensamientos tan nuevos para muchos católicos, que considero oportuno recitar el texto de los teólogos de mayor reputación. Primero, Malvenda, quien escribe expresamente sobre el tema, declara como opinión de Ribera, Gaspar Melus, Biegas, Suárez, Belarmino y Bosius que Roma apostatará de la fe, expulsará al Vicario de Cristo y volverá a su antiguo paganismo. Entonces la Iglesia será dispersada, llevada al desierto, y será por un tiempo, como fue al principio, invisible, escondida en catacumbas, en cuevas, en montañas, en lugares ocultos; por un tiempo, será barrida, por así decirlo, de la faz de la tierra. Tal es el testimonio universal de los Padres de la Iglesia primitiva.”

— Cardenal Henry Edward Manning, The Present Crisis of the Holy See, 1861, Londres: Burns and Lambert, pp. 88–90, p. 79

 

El cardenal Alfredo Ottaviani, quien leyó el Tercer Secreto, hizo referencia a uno de sus temas durante una alocución a los miembros de la Academia Mariana Internacional, y declaró:

“Basta echar una rápida mirada a lo que está ocurriendo en este momento en el mundo, para reconocer que sin la intervención de la Madre de toda misericordia junto al Todopoderoso, el mundo corre el riesgo de volverse pagano una vez más, un paganismo más deplorable que el primer paganismo, porque está agravado por la apostasía. Estamos siendo testigos de un verdadero diluvio de pecados, un diluvio que deja tras de sí un lodazal nauseabundo, infectado de inmoralidad, mentira y blasfemia...”

— 15 de diciembre de 1960

 

“Debido a la injusticia desenfrenada y al abuso de poder, hemos llegado a un compromiso con el materialismo ateo [el comunismo], una negación de los derechos de Dios. Este es el castigo predicho en Fátima… Todos los sacerdotes que apoyan la posibilidad de un diálogo con los negadores de Dios y con los poderes luciferinos del mundo [la masonería] están locos, han perdido la fe, ¡ya no creen en el Evangelio! Al hacerlo, traicionan la palabra de Dios, porque Cristo vino a traer a la tierra una alianza perpetua solo a los hombres de corazón [de buena voluntad], pero no se unió con los hombres sedientos de poder y de dominio sobre sus hermanos… El rebaño se dispersa cuando los pastores se alían con los enemigos de la Verdad de Cristo. Todas las formas de poder que se vuelven sordas a la voluntad de la autoridad del corazón de Dios son lobos rapaces que renuevan la Pasión de Cristo y hacen que la Madonna derrame lágrimas...”

— Padre Pío, 1963; en una amonestación pública a sus hijos espirituales durante el Concilio Vaticano II.

 

“La Santísima Virgen nos alertaba contra la apostasía en la Iglesia. No me sorprendería si el Tercer Secreto aludiera a tiempos oscuros para la Iglesia: graves confusiones y preocupantes apostasías dentro del mismo catolicismo… Si consideramos la grave crisis que hemos vivido desde el Concilio, los signos de que esta profecía se ha cumplido no parecen faltar…”

— Cardenal Silvio Oddi, 17 de marzo de 1990

 

“No puedo revelar nada sobre lo que he aprendido en Fátima acerca del Tercer Secreto, pero puedo decir que tiene dos partes: una concierne al Papa. La otra, lógicamente —aunque no debería decir nada— debería ser la continuación de las palabras: ‘En Portugal, el dogma de la Fe siempre será preservado.’”

— Padre Joseph Schweigl, 1952 (Pío XII lo envió a interrogar a Sor Lucía); Frère Michel de la Sainte Trinité, The Whole Truth About Fatima: The Third Secret, Vol. III, p. 710, p. 337–338

 

“Creo que hay una conexión entre aquello que se anuncia en la primera parte del Secreto, que se refiere a guerras y sufrimientos que estarían por todas partes, y la segunda parte, que concierne a las persecuciones y a una especie de colapso de la fe. Porque donde se colocó la elipsis (los tres puntos, ‘…’), significa: ‘Aquí está la tercera parte, que no se revela’, y luego la conclusión: ‘En Portugal el dogma de la fe siempre será preservado, etc.’ Esto me sugiere que existe una relación entre la fe y la tercera parte del Secreto. Por lo tanto, es algo que se relaciona con la Iglesia. Es una especie de crisis universal que afecta a toda la Iglesia y a toda la humanidad.”
— Padre José dos Santos Valinho (sobrino de Sor Lucía)

 

“Habiendo llegado al final de nuestra investigación, somos capaces de discernir, con casi certeza, los elementos esenciales del secreto final de Nuestra Señora:

Mientras que ‘en Portugal, el dogma de la Fe siempre será preservado’, en muchas naciones, quizás en casi todo el mundo, la Fe se perderá. Los pastores de la Iglesia fallarán gravemente en los deberes de su cargo. Por su culpa, las almas consagradas y los fieles, en gran número, se dejarán seducir por errores perniciosos difundidos por todas partes. Este será el tiempo de la batalla decisiva entre la Santísima Virgen y el diablo. Una ola de desorientación diabólica será lanzada sobre el mundo. Satanás se introducirá incluso hasta la cumbre más alta de la Iglesia. Cegará las mentes y endurecerá los corazones de los pastores. Y Dios los entregará a sí mismos como castigo por su negativa a obedecer las peticiones del Inmaculado Corazón de María. Esta será la gran apostasía predicha para los ‘últimos tiempos’; ‘el Falso Cordero’ y el ‘Falso Profeta’ traicionarán a la Iglesia en provecho de ‘la Bestia’, según la profecía del Apocalipsis.”

— Frère Michel de la Sainte Trinité, The Whole Truth About Fatima: The Third Secret, Vol. III, Conclusión, p. 576

 

Fuente: https://op54rosary.ning.com/forum/topics/fatima-the-great-apostasy

 

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