Por el triunfo del Inmaculado Corazón de María

Mostrando las entradas con la etiqueta León XIV. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta León XIV. Mostrar todas las entradas

sábado, 30 de agosto de 2025

¿EL PROCESO SINODAL PREPARA LA INSTAURACIÓN DEL REINO DEL ANTICRISTO?

 


Por FRANCESCA DE VILLASMUNDO

Bajo León XIV, tanto como bajo Francisco, la iglesia sinodal avanza a grandes pasos. En la Amazonía, tanto como en otros lugares, ha nacido un Proceso sinodal amazónico que, cinco años después, «representa un nuevo contexto de sinodalidad» para la Iglesia latinoamericana. Y un nuevo paso hacia la disolución de la autoridad del Pontífice romano y de los obispos. ¿Para preparar la instauración del reino del Anticristo?

El “Proceso sinodal amazónico” en marcha

El pasado 19 de agosto, el sitio oficial de la Santa Sede, Vatican News, publicaba un artículo ensalzando el “Proceso sinodal amazónico”, nacido hace 5 años, bajo el reinado de Francisco, y destinado a «crear una red panamazónica de comunicación eclesial que unifique los diferentes medios utilizados por las Iglesias particulares y los demás organismos eclesiales», llamada la CEAMA, Conferencia Eclesial de la Amazonía. Este nuevo organismo comprende siete Conferencias episcopales de los países amazónicos, organizaciones regionales tales como Cáritas, la CLAR y el REPAM, representantes de los pueblos indígenas y expertos nombrados por la presidencia de la organización y por el Papa. Vatican News señala que esta «dimensión “eclesial y sinodal” encarna el deseo de los obispos latinoamericanos expresado en Aparecida, cuando afirmaron que “los laicos deben participar en el discernimiento, la toma de decisiones, la planificación y la implementación” de la vida y de la misión de toda la Iglesia».

Más allá del lenguaje abstruso tan caro a nuestra posmodernidad, ¿qué significa esto? Este nuevo organismo, este «proceso sinodal amazónico», «representa un nuevo contexto de sinodalidad que la Iglesia latinoamericana ofrece a la Iglesia entera», explicó el cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, durante su discurso inaugural de la primera asamblea de los obispos de la CEAMA (Conferencia Eclesial de la Amazonía) en Bogotá, Colombia.

El cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, subrayó la continuidad entre la sinodalidad y el Concilio Vaticano II


El cardenal-prefecto continuó su análisis del proceso subrayando la continuidad entre la sinodalidad y el Concilio Vaticano II, la primera derivando en toda lógica del segundo: es un «“germen” que testimonia una “recepción latinoamericana brillante y creativa del Concilio Vaticano II, de los Sínodos sobre la Amazonía (2019) y sobre la sinodalidad (2023-2024)», que, «acogiendo la diversidad y valorando la complementariedad», nos invita a «crear una dinámica de comunicación adaptada a una Iglesia sinodal».

sábado, 26 de julio de 2025

SOLVE ET COAGULA - MONS. CARLO MARIA VIGANÒ

 


Stephen Kokx entrevista al Arzobispo Viganò.

 

 

“Lo diré sin rodeos: el lobby sinodal espera que León otorgue legitimidad canónica a un proceso subversivo de desmantelamiento del Papado; una especie de abdicación voluntaria del Monarca en favor de un Parlamento que, en respuesta a la renuncia al poder de jurisdicción y gobierno, lo reconozca como un primado honorífico que pueda ser útil en el plano ecuménico. En un paradójico absurdo jurídico, este lobby exige que quien posee un derecho divino ejerza la autoridad suprema para transmitir ese derecho al sínodo, algo que el Papa no puede hacer. Este golpe eclesial pretende llevar hasta sus últimas consecuencias el proceso revolucionario iniciado en el Vaticano II con la colegialidad episcopal de Lumen Gentium, extendiendo el gobierno de la Iglesia Católica a los laicos y a las mujeres, en detrimento total del vínculo indisoluble entre el poder del Orden Sagrado y el poder de Jurisdicción que ha existido en la Iglesia desde tiempos inmemoriales”.

 

 

Publicado en Kokx News el 18 de julio de 2025

Stephen Kokx – Excelencia, muchas de las decisiones de Prevost indican que desea continuar por el camino herético de sus predecesores, particularmente el camino sinodal trazado por Jorge Bergoglio. Muchos parecen creer que debemos “darle tiempo” y “mantener la esperanza” de que las cosas mejoren. Al mismo tiempo, parece que la agenda de Prevost es bastante clara y que el silencio o el “darle el beneficio de la duda” –a la vez que se presenta su pontificado de forma más positiva– podría causar escándalo por omisión y/o por crear falsas esperanzas. ¿Qué opina de estos argumentos y cómo deberían los católicos contemplar este “pontificado” con poco más de dos meses de existencia?

Arzobispo Viganò –

Ninguno de nosotros puede juzgar el fuero interno, es decir, las disposiciones interiores con las que una persona actúa o habla: solo Nuestro Señor, que ve lo más profundo de los corazones, puede hacerlo. Pero esto no significa que no podamos emitir un juicio en el fuero externo, es decir, sobre los efectos y consecuencias que las acciones o declaraciones de una persona pueden tener en general o en un contexto específico. Esto también se aplica a León, cuya elección es vista por muchos como un signo de cambio respecto al desastroso período de usurpación bergogliana, aunque no hay evidencia que lo sugiera. De hecho, las acciones de gobierno de León, sus nombramientos y declaraciones públicas se multiplican, demostrando su plena alineación con su predecesor de infausta memoria.

Yo mismo, como creo que muchos notaron en los días inmediatamente posteriores a la elección, preferí abstenerme de expresar públicamente mi parecer sobre León con comentarios que podrían haber parecido apresurados.

Sin embargo, tras poco más de dos meses, creo que ya es posible encontrar coherencia entre las acciones y declaraciones de León y la línea trazada por Bergoglio. Y quizás aquella aparición improvisada de la hermana Nathalie Becquart y otros miembros de la élite sinodal para tomarse una selfie con el recién elegido papa adquiera hoy un significado que al principio pudo pasar desapercibido. El mensaje que se puede sacar de esto –y que se acompaña de las sonrisas radiantes y satisfechas de muchos electores ultraprogresistas (entre ellos el cardenal Cupich de Chicago) que aparecieron en la Logia tras la fumata blanca– es que el camino sinodal, del que la Iglesia bergogliana y post-bergogliana no puede escapar de ningún modo, ya ha sido trazado, y que Leo fue elegido en la cuarta votación como continuador del mandato sinodal, y no del munus petrinum.

Lo diré sin rodeos: el lobby sinodal espera que León otorgue legitimidad canónica a un proceso subversivo de desmantelamiento del Papado; una especie de abdicación voluntaria del Monarca en favor de un Parlamento que, en respuesta a la renuncia al poder de jurisdicción y gobierno, lo reconozca como un primado honorífico que pueda ser útil en el plano ecuménico. En un paradójico absurdo jurídico, este lobby exige que quien posee un derecho divino ejerza la autoridad suprema para transmitir ese derecho al sínodo, algo que el Papa no puede hacer. Este golpe eclesial pretende llevar hasta sus últimas consecuencias el proceso revolucionario iniciado en el Vaticano II con la colegialidad episcopal de Lumen Gentium, extendiendo el gobierno de la Iglesia Católica a los laicos y a las mujeres, en detrimento total del vínculo indisoluble entre el poder del Orden Sagrado y el poder de Jurisdicción que ha existido en la Iglesia desde tiempos inmemoriales. Por otro lado, la extensión a las mujeres de funciones antes reservadas a los clérigos abre la posibilidad práctica de introducir roles para-ministeriales como diaconisas y ministros no ordenados. Es imposible no ver en esto también la realización de lo que exige la Agenda 2030 para la Igualdad de Género.

No sé si mis hermanos obispos y los fieles se dan cuenta de la amenaza mortal que representa esta acción subversiva y fraudulenta para la Iglesia Católica. Lo que la Revolución hizo en las naciones católicas se está consumando aquí en el plano eclesial: abolir la monarquía de derecho divino y reemplazarla por el fraude de la soberanía popular, cuando en realidad lo que se busca es trasladar el poder a manos de una élite y transformarlo en tiranía. La sinodalización en este sentido, o mejor dicho, la pseudo-democratización de la Iglesia, constituirá el instrumento y la causa de su destrucción, exactamente como ya ha ocurrido en la esfera civil. Esta aversión a la Realeza sagrada del Papado manifiesta todo el odio de Satanás: pues tanto en los monarcas católicos como en el Pontífice romano brilla la Sagrada Majestad de Cristo Rey y Pontífice, que reina desde el Trono de la Cruz.

Esta democratización –solo nominal, ya que en realidad el poder reside en el lobby– implica necesariamente una burocratización de la Iglesia, y sabemos que la burocracia es uno de los principales instrumentos de control de la masonería. Los burócratas, bajo el pretexto de procedimientos “democráticos” y “sinodales”, pueden manipular asambleas, orientar votaciones, moldear el consenso y hacer parecer que una propuesta surge espontáneamente de la base, cuando en realidad ha sido cuidadosamente diseñada por quienes manejan todo el aparato organizativo del Sínodo. Es una ficción colosal, un engaño que reproduce grotescamente la desintegración de la sociedad civil después de 1789. Un fraude que también conducirá al Terror, la dictadura de un cuerpo sin rostro ni nombre, que promulgará dogmas climáticos y nuevos pecados contra el medio ambiente, excomuniones por dañar a los migrantes o por negar el dogma de la inclusión LGBTQ+, y lo hará en nombre de la Iglesia sinodal. En este caso, sin embargo, no hay un Luis XVI que guillotinar: el monarca ya se ha inclinado ante los ídolos globalistas y su rendición parece convencida y deseada, casi planificada de antemano.

A quienes persisten en idealizar la imagen de León según un modelo ciertamente tranquilizador pero que no se corresponde con la realidad, les aconsejo que evalúen los hechos tal como son, y no intenten adaptarlos a sus deseos. Parto de un hecho indiscutible: que Robert Francis Prevost fue nombrado Prefecto del Dicasterio para los Obispos y creado Cardenal en 2023 por el mismo Bergoglio. Y si Bergoglio hubiera tenido siquiera la más mínima sospecha de que Prevost no sería coherente con su línea de gobierno, nunca lo habría elevado al cardenalato, ni lo habría colocado al frente de un Dicasterio estratégico como el que decide sobre los nombramientos episcopales.

Temo que León represente un “modernismo con rostro humano”, por usar la expresión “socialismo con rostro humano” asociada a la Primavera de Praga de 1968, y que su modo indudablemente persuasivo y afable pueda inducir a error a muchos, especialmente a los “católicos conservadores”, llevándolos a construir una imagen virtual del Papa que, sin embargo, no parece corresponder con la realidad. El tiempo transcurrido entre el Nuntio vobis y la promulgación de la Missa votiva “verde” ha visto emerger una serie de pronunciamientos sobre diversos temas, todos los cuales nos muestran a un León plenamente comprometido con la eclesiología conciliar y sinodal, con la única diferencia respecto a su predecesor en su tono más cortés.

No olvidemos que durante la psicopandemia, el obispo Prevost no dudó en apoyar la narrativa pro-vacunas, recomendando el uso de mascarillas, el distanciamiento social y el cumplimiento de las inútiles y perjudiciales normas sanitarias de la OMS. Sus recientes llamados a una “conversión ecológica” emplean una terminología teológica que transforma una teoría anticientífica psicoambientalista, impregnada de neomaltusianismo y gnosticismo, en una Religión de la Naturaleza mucho más presentable, ante la cual se inclina como cabeza de la Iglesia de Roma, testigo clave del globalismo.

Pero si los arquitectos de la Agenda 2030 son declarados enemigos de Nuestro Señor Jesucristo y de su Iglesia; si sus falsas emergencias sirven para legitimar falsas soluciones que implican el exterminio de parte de la humanidad y la esclavitud de los sobrevivientes, ¿cómo es posible, me pregunto, que un Papa no se dé cuenta de la enorme responsabilidad moral que asume al ratificar el golpe de Estado del Nuevo Orden Mundial?

¿Cómo juzgarán el tribunal de la Historia –y el infalible tribunal de Cristo Rey y Pontífice– esta traición del munus petrinum?

León se encuentra en una encrucijada: o elige el camino ancho y cómodo del consenso del mundo y de los enemigos de Cristo y pierde su alma junto con el Rebaño que el Señor le ha confiado; o elige el camino estrecho y escarpado de la sequela Christi, del retorno a la Tradición, en testimonio heroico de Cristo, y de Cristo Crucificado (1 Cor 2,2). Ha llegado la hora de cerrar de una vez por todas la “experiencia conciliar”, con sus terribles fracasos y devastaciones en todos los frentes. Persistir en este camino de autodestrucción y perdición suicida significaría hacerse responsable de una ruina anunciada, fomentándola en vez de denunciarla y combatirla por todos los medios. Recordemos con confianza las palabras de Nuestro Señor a Pedro: Yo he rogado por ti, para que tu fe no desfallezca; y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos (Lc 22,32).

16 de julio de 2025

Beata María Virgen del Monte Carmelo

https://exsurgedomine.it/250718-solve-eng/

 

LA DEMOLICIÓN DEL PAPADO POR ETAPAS

 

La demolición del Papado por etapas

 


 

Por P. FLAVIO MATEOS

 

Capítulo de nuestro libro “FATIMA Y EL MILAGRO DEL SOL. LA GUERRA DEL ANTICRISTO CONTRA EL PAPADO”, Ediciones Reacción, 2024. Lo actualizamos.

 

Puede verse una lógica en las acciones y actitudes de los revolucionarios que tomaron la Iglesia en el Vaticano II (“la Revolución de octubre pacífica en la Iglesia”, como lo llamó el dominico Congar). La intrusión de la democracia (influencia sobre todo del americanismo, pero llevada a cabo con particular habilidad por los neo-teólogos subjetivistas alemanes) ha debido desacralizar paulatinamente el Papado, mientras iban democratizando cada vez más la Iglesia, que de conciliar está pasando a ser ahora sinodal. En una palabra: protestante.

Podemos establecer algunos de esos hitos en este camino de deformación del Papado:

 

1.- Colegialidad y bicefalismo en la Iglesia, en la constitución dogmática Lumen Gentium (1964). [1]

2.- Pablo VI visita la sede de las Naciones Unidas (ONU). Se presenta como un hombre igual a los demás, que ha de ponerse al servicio de las Naciones (cuando las Naciones deben estar al servicio de la Iglesia). Hace una “ratificación moral y solemne de esta augusta Organización” (nacida de la Revolución anticristiana y merced al triunfo masónico-liberal-comunista tras la Segunda Guerra Mundial), y afirma que “Los pueblos se vuelven a las Naciones Unidas como hacia la última esperanza de concordia y paz” (¡!) (1965).

3.- Pablo VI entrega su anillo, símbolo de la autoridad papal suprema, al herético, cismático y falso arzobispo de Canterbury, en la basílica de San Pablo extramuros (1966).

4.-Declaración de Pablo VI: “el Papa es el más grave obstáculo en el camino hacia el ecumenismo” (1967).

5.- Deposición de la tiara por Pablo VI (1969). La Iglesia adopta la democracia, el Papa deja de ser un monarca.

6.- Actitudes populistas, adopción de sombreros, gorras o cascos grotescos y hasta bailes de música moderna por parte de los papas conciliares (desde el posconcilio hasta la actualidad).

7.- Reunión interreligiosa de Asís. El Papa (Juan Pablo II) es uno más entre todos los líderes de las falsas religiones. (1986)

8.- Juan Pablo II es el primer Papa en visitar una sinagoga (1986). El Papa en pie de igualdad con el Rabino de Roma, como dos amigos. Los Papas posteriores seguirán su ejemplo.

9.- Redefinición ecuménica del Papado, proyectada en la encíclica Ut unum sint de Juan Pablo II (1995).

10.- Benedicto XVI quita la tiara de su escudo papal (2005).

11.- Tras su renuncia (2013), Benedicto XVI se convierte en “papa emérito” (viejo proyecto suyo, en connubio con Karl Rahner). Permanece en Roma, donde hay ahora “dos Papas”.

12.- Francisco se dedica sistemáticamente a derruir la imagen de Papa, bajo capa de “humildad”. Hasta llegará a colocarse una nariz de payaso.

13.- Documento de estudio del Dicasterio para la promoción de la unidad de los cristianos: “El Obispo de Roma. Primacía y sinodalidad en los diálogos ecuménicos y en las respuestas a la encíclica Ut unum sint”, tendiente a establecer una “Iglesia sinodal”, donde el Papa pasaría a ser no ya un primus inter pares con los obispos católicos, sino también con los de otras denominaciones o sectas cristianas. Así lo explicita el cardenal Koch (modernista y, desde luego, “sinodal”): “el primado debe ejercerse de manera sinodal […] poniéndonos a la escucha de las diferentes tradiciones cristianas con respecto a la sinodalidad y al primado, como contribución al proceso sinodal”.

14.-Francisco, hacia el penoso final de su pontificado, aparece públicamente sin la sotana blanca, con un grotesco pijama.

15.-León XIV, promotor de la iglesia “sinodal” o “democrática, afirma indirectamente en un discurso a una “Peregrinación ecuménica ortodoxa-católica de los Estados Unidos” que Roma (es decir, el Papa) no tiene la primacía respecto de las otras denominaciones cristianas. El Papa ya no es “un obstáculo en el camino al ecumenismo”. La doctrina católica es arrojada al cesto de la basura.

 

Última reflexión: aunque los modernistas, herejes y masones hagan todos los esfuerzos que su perversa sinuosidad les aconseje, aunque conjuren y arbitren asambleas y nuevos documentos, todo va a un final fracaso: el Papado seguirá en pie puesto que la palabra de Dios no pasa: “Y Yo, te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificare mi Iglesia, y las puertas del abismo no prevalecerán contra ella” (Mt. XVI, 18).

 

[1] “¿Cómo introduce esta constitución la bicefalia en la Iglesia? Tras recordar que el Papa «tiene la potestad plena, suprema y universal sobre la Iglesia [...]», LG añade inmediatamente que «el orden de los obispos [...] constituye también el sujeto de la potestad suprema y plena sobre toda la Iglesia» (§ 22). Mientras que hasta entonces la Iglesia había sido una monarquía con un único poder supremo, el del Papa, LG afirma de repente un doble poder supremo, una Iglesia bicéfala. Junto al Papa, el colegio episcopal (incluido el Papa) también está sometido al poder supremo. Este cambio de doctrina fue tan considerable que el Papa Pablo VI consideró que debía intervenir y redactar una «nota explicativa prævia» (nota explicativa preliminar) que debía adjuntarse a la Constitución, en la que matizaba este cambio: «Para no poner en tela de juicio la plenitud del poder del Romano Pontífice, [...] el colegio está siempre y necesariamente de acuerdo con su cabeza, que en el colegio conserva íntegramente su oficio de vicario de Cristo y pastor de la Iglesia universal». Esta nota impide, pues, que el colegio ejerza por sí solo el poder supremo en la Iglesia, lo que constituye una herejía condenada, pero no suprime la «bicefalia». El nuevo Código de Derecho Canónico de 1983 ratificó esta doctrina de la doble potestad suprema en el canon 336: «El colegio episcopal, cuya cabeza es el sumo pontífice y del que forman parte los obispos [...] está también, en unión con su cabeza y nunca sin ella, sometido a la suprema autoridad de la Iglesia”. (Petit catéchisme du concile Vatican II, Le Sel de la terre No 93, ÉTÉ 2015).

GRAVE DECLARACIÓN DE LEÓN XIV PARA CONTINUAR LA OBRA DE DEMOLICION DEL PAPADO



Grave traición al primado petrino por parte de su nuevo ocupante, el plan masónico « continúa:

 

“La unidad entre los creyentes en Cristo es uno de los signos del don divino de la consolación; la Escritura promete que «en Jerusalén serán consolados» (Is 66,13). Roma, Constantinopla y todas las demás Sedes no están llamadas a disputarse la primacía, para no correr el riesgo de encontrarnos como los discípulos que, en el camino, precisamente mientras Jesús anunciaba su pasión inminente, discutían sobre quién de ellos era el más grande (cf. Mc 9, 33-37).”

https://www.vatican.va/content/leo-xiv/es/speeches/2025/july/documents/20250717-pellegrinaggio-ecumenico-usa.html

 

« https://agendafatima.blogspot.com/2025/07/la-iglesia-conciliar.html


HABLA LA DOÑA DEL VATICANO

 


Nathalie Becquart: “León XIV ejercita el papado de forma sinodal”

 

La subsecretaria del Sínodo de los Obispos advierte a las diócesis que “no basta con tener un documento y dejarlo archivado”.

 

Revista Vida Nueva digital.

Ya se han publicado las “Pistas para la Fase de Implementación” y por eso llega el turno de las diócesis. Esta es una “etapa clave” para la religiosa Nathalie Becquart, subsecretaria del Sínodo, en una entrevista a los medios vaticanos, en la que “concretar las recomendaciones del documento final, llevarlas a la vida con creatividad, respetando la diversidad de contextos de las Iglesias locales”. “No basta con tener un documento y dejarlo archivado. Cada Iglesia local debe discernir cómo aplicar sus recomendaciones en su realidad concreta”, advierte.

Una “fase abierta” hasta 2028 que habrá una Asamblea Eclesial en Roma. “He visto la belleza de una Iglesia que es una, pero diversa en contextos, culturas y modos de vivir la fe”, destaca la religiosa, que sabe que “cada Iglesia local tiene su camino, pero no debe caminar sola. Este documento subraya que no puede haber conversión sinodal en solitario”. “Por eso el Sínodo enfatiza el papel de las Iglesias locales, pero también el diálogo entre ellas: en provincias eclesiásticas, conferencias episcopales, y a nivel continental”, añadió.

Un estilo sinodal

“Todos los bautizados están llamados a ser protagonistas. En sus parroquias, movimientos, comunidades. También deben implicarse escuelas, universidades católicas, ministerios juveniles, Cáritas, comunidades religiosas… toda la diversidad eclesial”, invita de cara a la recepción. Y, además, destaca que “desde el inicio de su pontificado, el papa León ha reafirmado el deseo de ser una Iglesia sinodal. De hecho, ya lo vivía cuando era obispo en Perú: organizó la fase de escucha en su diócesis, participó en reuniones continentales, en la redacción del ‘instrumentum laboris’, en las asambleas de 2023 y 2024, y en dos grupos de estudio.

Para Becquart, el Papa “tiene un estilo muy similar al del papa Francisco: escucha, espiritualidad profunda, cercanía con el pueblo. Ejercita el ministerio petrino de forma sinodal. Cuando falleció el papa Francisco, fue conmovedor ver la cantidad y diversidad de personas que vinieron a despedirlo: pobres, niños, personas con discapacidad, líderes religiosos. Lo mismo ocurrió en la elección del papa León: la gente sintió esa conexión inmediata. La sinodalidad se manifiesta también en estos gestos concretos”

https://www.vidanuevadigital.com/2025/07/09/nathalie-becquart-leon-xiv-ejercita-el-papado-de-forma-sinodal

 

Habla también otro espantajo, la “presidenta de la Unión Internacional de Superioras Generales”:

 


Oonah O’Shea: “Espero ver diaconisas con León XIV”

 

La Unión Internacional de Superioras Generales (UISG) tiene nueva presidenta desde mayo: la australiana Oonah O’Shea, superiora general de las Hermanas de Notre Dame de Sion –presentes en los cinco continentes–. 

De padres irlandeses, O’Shea ha sido maestra de primaria en escuelas católicas y activista de la Juventud Obrera Cristiana (JOC) en Australia.

sábado, 12 de julio de 2025

¿INDIFERENTES A LA NUEVA MISA?

 


Por P. ALVARO CALDERON

 

Dos ritos diferentes coexistiendo para la celebración de la misa. Realmente ¿debemos considerarlos a ambos como dos expresiones de una misma cosa? Ciertamente no es una cuestión de gustos: es la fe católica la que está en juego. Recordemos cómo debemos juzgar la misa reformada de 1969.

Muchos problemas se nos resolverían si fuéramos al menos indiferentes a la Nueva Misa. De Roma no nos piden otra cosa. De tantos católicos perplejos por la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II, muchos han creído que lo malo del nuevo rito venía sólo de la manera de celebrarlo y peregrinan por las parroquias buscando Padres, siempre escasos, que celebren con piedad y no den la comunión en la mano. Otros, mejor informados, saben que la diferencia no está en los modos del sacerdote sino en el mismo rito y reclaman la Misa tradicional argumentando, con algo de hipocresía, el enriquecimiento que implica la pluralidad de ritos: el nuevo es bueno pero el viejo también ¡mejor entonces los dos!

Aunque en Roma no hay tontos, han dejado correr esta excusa para los grupos tradicionales que se ampararon en la Comisión Ecclesia Dei. Es más, a los Padres tradicionalistas de la diócesis de Campos, Brasil, les han permitido quedarse con su rito tradicional aún diciendo que la Misa Nueva es menos buena. Pero en Roma molesta nuestra Fraternidad porque no sólo no dice que es buena, sino que la combate como perversa, inquietando la perplejidad que después de cuarenta años de Concilio tantos católicos no dejan de padecer. Si al menos guardáramos indiferencia —¡que recen los otros como quieran!— de Roma nos ofrecerían dejarnos en paz. ¿Podemos ser indiferentes a la Misa Nueva?

La víspera de su Pasión, habiendo llegado la hora de ofrecer a su Padre el sacrificio redentor, Nuestro Señor hizo un pacto con su Iglesia: Hæc quotiescumque feceritis, in mei memoriam facietis (Acordaos de que he muerto por vuestros pecados, que Yo me acordaré de vosotros en la presencia del Padre). Y como Dios que es, nos dejó el inmenso misterio de la Misa, por la que su Sacrificio permanece siempre vivo, siempre nuevo, permitiéndonos asistir como ladrones arrepentidos: Memento Domine, famulorum famularumque tuarum (Acuérdate de nosotros ahora que estás en tu Reino).

La memoria viva de la Pasión que se renueva por la doble consagración gracias a los poderes del Sacerdocio, la unión misteriosa con la Víctima divina que se realiza por la comunión, es la única vía que tiene el duro corazón del hombre para volver al amor de Dios, porque nada llama tanto al amor como el saberse muy amado, y la Pasión de Nuestro Señor fue la máxima demostración de amor: nadie ama más que aquel que da la vida por su amigo. Por eso la obra de la Redención que Cristo llevó a cabo en la Cruz, no se hace efectiva para nosotros sino gracias al Sacrificio de la Misa.

Ahora bien, así como no cabe indiferencia ante la Cruz de Cristo, tampoco ante el rito que renueva su Sacrificio. Quien no está conmigo está contra Mí, dijo Nuestro Señor, y esta ley se impuso por la Pasión. Puedo pasar al lado de un vendedor si pienso que lo que ofrece no lo necesito; pero no puedo pasar al lado de un hombre herido porque él me necesita a mí. No es patente pecado la indiferencia ante el Jesús de los Milagros, pues puedo decir con San Pedro: aléjate de mí, que soy un pecador; pero es horrible traición decir: no conozco a ese hombre, ante el Jesús Crucificado. Es la Cruz de Nuestro Señor la que nos urge a tomar partido, ¡no me es lícito dejar de lado a Aquél que muere por mis pecados!

El nuevo rito creado bajo Pablo VI para sustituir el bimilenario rito romano de la Santa Misa, ha suprimido el escándalo de la Cruzevacuatum est scandalum crucis! La intención inmediata que guió la reforma de la Misa fue el ecumenismo: crear un rito suficientemente ambiguo como para ser aceptado por los protestantes más “cercanos” al catolicismo; pero la intención última ha sido suprimir la espiritualidad dolorista de la Cruz, porque su negatividad supuestamente repugna al hombre moderno.

Es asombroso, pero si a nuestra religión le quitamos el escándalo de la Cruz, cesa la persecución y los judíos son los primeros en aceptarnos el diálogo ecuménico. Ya San Pablo señalaba este misterio a los Gálatas, tentados de judaizar creyendo necesario circuncidarse:

Si aún predico la circuncisión, ¿por qué soy todavía perseguido? ¡se acabó ya el escándalo de la cruz!

Como lo muestra el librito sobre El problema de la reforma litúrgica, de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, la teología que subyace tras la misa de Pablo VI escamotea la Pasión de Nuestro Señor para quedarse solamente con las alegrías de la Resurrección: supera el Misterio de la Cruz con la nueva estrategia del Misterio Pascual. Se ha vuelto a repetir lo que pasó cuando Jesús anunció por primera vez su Pasión:

Pedro, tomándole aparte, se puso a amonestarle diciendo: No quiera Dios, Señor, que esto suceda (San Mateo, 16, 22).

Visto con ojos muy humanos, con Cristo resucitado la Iglesia puede entrar en el mercado de este mundo, que se muere por todos lados, con un producto de lujo: la esperanza de resurrección; pero con el Crucificado todos los sermones tienen que empezar como el primero de San Pedro, reprochándole peligrosamente a los poderosos de este mundo: Vosotros le disteis muerte (Hechos 2, 23). Pero, ¿cuál fue la reacción de Nuestro Señor ante el cambio de estrategia publicitaria que le proponía su Vicario?

sábado, 5 de julio de 2025

CAMPAÑA DE RECOLECCIÓN DE FIRMAS PIDIENDO AL PAPA LEÓN XIV QUE REALICE LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA QUE NUESTRA SEÑORA SOLICITÓ EN FÁTIMA

 


Aun pesimistas, llamamos a adherir a esta campaña. Comentarios del blog entre corchetes.

 

En 1917, Nuestra Señora de Fátima se apareció a tres niños pastores con un mensaje urgente del Cielo: Dios deseaba salvar al mundo mediante la devoción al Inmaculado Corazón de María. Este mensaje venía con instrucciones claras. El principal de ellos fue la consagración de Rusia —sólo Rusia— por el Papa en unión con todos los obispos del mundo. [Pedido solemne en medio de una Teofanía Trinitaria a la Hna. Lucía, el 13 de junio de 1929] Este acto, junto con el establecimiento de la devoción de los Cinco Primeros Sábados, provocaría la conversión de Rusia y un período de paz para el mundo.

Más de un siglo después, esta consagración aún no se ha cumplido como se había solicitado. Si bien varios papas han hecho intentos parciales —incluido el más reciente del Papa Francisco en 2022—, ninguno ha cumplido las condiciones simples pero precisas establecidas por el Cielo. ¿El resultado? Sin paz, sin conversión y la continua propagación de la guerra, el caos y la confusión espiritual.

Ahora, en este momento de cambio histórico en la Iglesia, tenemos una oportunidad providencial.

El Papa León XIV ha inspirado esperanza y apertura entre los fieles.  [No entre nosotros, lamentablemente, que sabemos es una continuidad light de lo que se viene enseñando desde el Vaticano II y más recientemente con la “iglesia sinodal” de Francisco] Tiene la oportunidad de hacer lo que nadie antes que él ha hecho: cumplir finalmente la petición de Nuestra Señora y hacer descender las gracias prometidas al mundo.

Por eso les instamos a firmar nuestra petición, solicitando respetuosamente al Papa León XIV que realice la consagración plena, pública y colegiada de Rusia al Inmaculado Corazón de María, exactamente como lo describió Nuestra Señora de Fátima.

El estudioso de Fátima, Christopher Ferrara, afirmó claramente: “Aún no ha habido una consagración colegiada del Papa y los obispos juntos de Rusia —sólo Rusia— al Inmaculado Corazón”. Intentos como el de 2022 han consagrado “a la humanidad,” “a Ucrania,” e incluso “a nosotros mismos,” pero Nunca Rusia explícitamente y sola, según lo solicitado. Y ninguno se ha hecho en plena unión con los obispos del mundo, ni se han incluido los actos de reparación y promoción de los Cinco Primeros Sábados devoción, que Nuestra Señora insistió que eran partes esenciales del mensaje. [Es lo mismo que venimos diciendo en solitario desde hace tres años, contra la corriente conservadora que aceptó y aplaudió entusiasmada el acto de Francisco, con los resultados hoy a la vista].

El obispo Joseph Strickland y el obispo Bernard Fellay —junto con muchos líderes laicos, sacerdotes y eruditos— estuvieron de acuerdo: la consagración de 2022 no fue suficiente. Carecía de la claridad, el enfoque y la obediencia que el Cielo exige. [El obispo Fellay fue confuso, titubeante y apagado en su cometario de entonces, lo hemos señalado en un artículo de nuestro blog. Puede verse el enlace al pie de este artículo. No sabemos qué es lo que piensa hoy Mons. Fellay, porque de ese tema se habla cada vez menos en la FSSPX]

Y, sin embargo, el llamado sigue siendo claro: Dios todavía está esperando que la consagración se haga correctamente. Como Nuestro Señor le dijo a Sor Lucía en 1931: “Lo harán, pero será tarde.” La petición del Cielo se cumplirá—pero ¿a qué costo si continuamos demorándonos?

El Papa León XIV representa un nuevo capítulo en la vida de la Iglesia. Ya están surgiendo señales de apertura al mensaje completo de Fátima. Incluso las conferencias episcopales que antes eran indiferentes ahora respaldan los Cinco primeros sábados de devoción—un desarrollo sorprendente y esperanzador. [Excelente de ser así. Por el momento no tenemos esas noticias]

Ahora es el momento de actuar. Con urgencia orante, debemos presentar nuestra súplica al Santo Padre. Como fieles laicos, es nuestro deber recordar con amor a nuestros pastores la sencilla petición del Cielo— y unirnos para pedir al Papa León XIV que logre el triunfo del Inmaculado Corazón de María.

Esta petición no trata de críticas, sino de caridad. No se trata de política, sino de obediencia. No se trata de nostalgia, sino de salvación.

Como explica David Rodríguez del Centro Fátima: “Una verdadera consagración podría completarse con una oración que dura menos de cinco minutos y puede realizarse de forma gratuita.” El costo es pequeño. La recompensa es inconmensurable: paz, conversión y una Iglesia renovada.

Por favor firme la petición y compártala con otros. Que el Papa León XIV sepa que los fieles están dispuestos a estar con él en obediencia a la voluntad de Dios.

El mundo gime bajo el peso de la guerra, el pecado y el error. Se nos ha dado un remedio. Es hora de usarlo.

Al final, Su Inmaculado Corazón triunfará. Ayudemos a acercar ese día. Firma la petición ahora.

La petición y el artículo en el siguiente enlace:

https://lifepetitions.com/petition/consecrate-russia?utm_source=www_home

 

ENTRADAS RELACIONADAS EN NUESTRO BLOG:

 

https://agendafatima.blogspot.com/2022/03/responde-la-consagracion-de-rusia-por.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/03/linea-media-conforme-y-acomodada-con-la.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/04/rusia-consagrada.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/04/falsificacion-de-fatima-i.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/04/falsificacion-de-fatima-ii.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/06/la-consagracion-realizada-por-francisco.html

https://agendafatima.blogspot.com/2022/11/que-es-una-consagracion.html

https://agendafatima.blogspot.com/2023/05/consagro-el-papa-francisco-rusia-como.html

https://agendafatima.blogspot.com/2023/05/13-de-mayo-de-2023-nuevo-fruto-de-la.html

https://agendafatima.blogspot.com/2023/08/rosario-por-la-consagracion-de-rusia-al.html

https://agendafatima.blogspot.com/2024/12/se-consagro-exactamente-rusia-maria.html

https://agendafatima.blogspot.com/2025/01/la-consagracion-de-rusia-al-inmaculado.html

https://agendafatima.blogspot.com/2025/05/dios-quiere-salvar-rusia-solo-traves-de.html

https://agendafatima.blogspot.com/2025/06/pasaron-96-anos.html

 

DEL CARDENAL BURKE, LOS CONSERVADORES Y UNA LECCIÓN DE CHESTERTON

  



“No es suficiente decir la verdad, si los errores

no son detectados y refutados”.

 

Concilio de Trento, Introducción a los cánones

sobre la santa Eucaristía.

 

Por P. FLAVIO MATEOS


Ciertamente, el lector católico que nos lee no pensará que es banal, de poca monta, el plantearse una definición acerca de un tema que concierne al centro mismo de nuestra religión: hablamos de la santa Misa. Ni por eso mismo puede pasar indiferente ante el problema de la reforma litúrgica, si es que alguna noción tiene a su respecto. Sin embargo, este asunto pareciera baladí para una gran parte del clero, y la preocupación mayor en su horizonte estaría dada por el deseo ferviente de que haya una “paz litúrgica”. Nada de complicarse la vida con un combate por la verdad, ¿acaso el Vaticano II no hizo del diálogo el nuevo método para resolverlo todo? ¿No son el diálogo y el consenso los elementos democráticos por excelencia? ¿No fueron envainadas las espadas, a fin de favorecer la diplomacia y la “cultura del encuentro” con los “hermanos separados”? “No vine a traer la espada sino la paz”, le han hecho decir a Nuestro Señor, una y otra vez.

Nuestro aviso, nuestro llamado de atención, no tiene nada que ver con el consejo de san Pablo a Tito: “Evita las cuestiones necias, las genealogías y las contiendas y debates sobre la Ley, porque son inútiles y vanas” (Tito III, 9), sino más bien con una dilucidación que atañe a nuestra propia fe y el modo de adorar a Dios, a si ha de continuar renovándose el Santo sacrificio de Nuestro Señor en los altares, o si pretendemos rendir culto a Dios mediante la ofrenda espuria de Caín. Es decir, es el tema de la mayor importancia, puesto que, como decía Mons. Lefebvre, “como el sacrificio de Nuestro Señor está en el corazón de la Iglesia, en el corazón de nuestra salvación y en el corazón de nuestras almas, todo lo que se relaciona con el santo sacrificio de la misa nos toca profundamente a cada uno de nosotros personalmente. Tenemos que participar en este sacrificio para la salvación de nuestras almas”. Así pues, ¿podemos permanecer indiferentes a la Misa?

Hay sacerdotes que, a pesar de su pretendido antiliberalismo, han caído en un “pluralismo” pacifista propio de los liberales, optando por buscar un consenso legalista en un grado de obediencia tal que deja de ser virtuoso para volverse más bien vicioso, evitando de ese modo complicarse la vida con asuntos que podrían poner en entredicho su propia situación dentro del marco estructural de la Iglesia. Tendrán que perdonarnos, pero no podemos aceptar eso. Aunque nos cueste la marginalización, el desprecio, la indiferencia por lo que decimos. No podemos ser tolerantes con el error y no podemos dejar de resistirlo, en la medida que Dios nos asista con su gracia, a fin de evitarle a quien nos escucha, navegar por las aguas cenagosas de la confusión que ponen en riesgo la propia fe. Se nos pide ser “luz del mundo y sal de la tierra”. Aunque eso no nos conceda miles de “likes” en las redes sociales. La verdad no suele ser popular, y por eso termina crucificada. Lo que confirma el aserto de Louis Veuillot: “Las causas que mueren son aquellas por las que no se muere”.

Cuando un sacerdote reputado, popular, mediático, “contrarrevolucionario”, dice que celebra la misa en idioma vernáculo y el rito tridentino, que celebra diariamente ambas, y que jamás ha tenido problema con eso, uno comprende que hay un problema grave en la Iglesia, puesto que si los más rescatables de los curas, los de buenas intenciones, los conservadores que aún conservan cierto sentido de la tradición, tienen una venda sobre los ojos, que les impide ver la contradicción entre la verdad y el error, ¿qué queda para la gran masa arrebañada en el progresismo, el ecumenismo y el sinodalismo papólatra? Evidentemente, se trata de lo que la hermana Lucía llamó una “desorientación diabólica”. Pero, como dice Nuestro Señor, “el que no recoge conmigo, desparrama."(Mat. 12,30). Así algunos primero recogen, y luego desparraman, y lo que escriben con la mano, lo borran con el codo. Emiten declaraciones contrarrevolucionarias, pero terminan realizando acciones revolucionarias. En tanto, el mal avanza. Y muchos confundidos se quedan en paz, y nunca se hacen problema con eso. Porque, aparentemente, no hay problema alguno. ¿Es así?

Viene a cuento todo esto, porque estos mismos sacerdotes birritualistas y anti-belicistas han destacado con honores la propuesta que el cardenal Burke hizo recientemente a León XIV: “Burke ha pedido a León XIV que se ponga fin a la persecución de la Misa en Latín”. El informe que se ofrece nos dice que “en la Conferencia sobre Fe y Cultura organizada en Londres por la Latin Mass Society, el cardenal Raymond Burke ha transmitido su esperanza al Papa León XIV de que el Santo Padre ponga fin a la «persecución desde dentro de la Iglesia» de «aquellos que desean adorar a Dios según el uso más antiguo del rito romano». Y agregó el cardenal: «Ciertamente ya he tenido ocasión de hablarlo con el Santo Padre... tengo la esperanza de que, en cuanto sea posible, retome el estudio de esta cuestión y trate de restablecer la situación tal como quedó después de Summorum Pontificum, e incluso de continuar desarrollando lo que el Papa Benedicto XVI había legislado tan sabia y amorosamente para la Iglesia».

No hay dudas de que en varias ocasiones el cardenal Burke ha pronunciado valientes declaraciones y es uno de los conservadores más destacados del plantel de la Iglesia, no cuestionamos sus intenciones, pero también es cierto que siempre ha moderado mucho sus pasos y sus palabras, de modo de no causar mas que un leve escozor en los modernistas enquistados en lo más alto del Vaticano. Burke se encuentra muy limitado en su tímida postura y jamás pondría en riesgo su status, más allá de alguna que otra actitud que lo colocó en situación incómoda ante la inquina bergogliana, pero que nunca llegó al extremo que pudo sostener un Mons. Vigano. Ninguna de sus críticas lo llevaron, sin embargo, a salirse de su posición birritualista y de sostener –aún ahora- la fracasada “hermenéutica de la continuidad”, cosa a todas luces impracticable y, tal vez en algunos, naif.

“ESTAMOS MUY CERCA DEL FINAL”

  “ESTAMOS MUY CERCA DEL FINAL”           Por FLAVIO MATEOS   El Padre Nicholas Gruner, tenaz apóstol hasta su muerte del mensaje ...