Los “errores de Rusia”: El mesianismo judío
anticristiano y naturalista, financiado por los banqueros internacionalistas, implementado
por las logias masónicas, en función del gobierno mundial del Anticristo.
“Mater Populi fidelis” en contexto
El
reciente documento excretado por el “Dicasterio para la Doctrina de la Fe” a
cargo del incompetente cardenal “Tucho” Fernández, con rúbrica del papa León
XIV del día 7 de octubre, nada menos (piénsese que esa fecha es día de victoria
de la Iglesia y la Virgen contra los enemigos de la Religión católica), llamado
ambiguamente “Mater populi fidelis” [1] , que rechaza directamente y en oposición
a lo enseñado por la Escritura, el Magisterio y la Tradición católica, los
títulos de Corredentora y Mediadora de todas las gracias de Nuestra Señora, ha
suscitado muchas reacciones en los fieles católicos aun no derruidos en su intelecto
y su corazón por el estropicio conciliar y sinodal. Deo gratias! Pero, previsiblemente,
y por eso este ominoso documento ha podido ver la luz, cardenales, obispos y
sacerdotes permanecen mudos o algunos pocos han tenido reacciones tibias o
inadecuadas al respecto. Mismo decir en la Tradición católica en general. No,
no estamos a la altura de lo que se requiere en nosotros como discípulos de
Cristo e hijos de Su Madre. En algunos el celo aparece empañado, apagado,
demasiado cauteloso, mientras que en otros ha explotado una sobreactuación muy bien
publicitada.
Se han
publicado buenos escritos sobre la doctrina católica de la Corredención y
Mediación marianas, y alguna que otra refutación parcial del esputo vaticano [2].
Quizás en el futuro nos llegue algún documento más exhaustivo aún que demuela
pieza a pieza y párrafo a párrafo el mencionado documento antimariano. Lo que
queremos hacer ahora es poner esto que ha ocurrido en el contexto de la guerra
que estamos peleando.
Las imágenes
que nos llegan de Gaza, arrasada, en ruinas, son aplicables a la situación
espiritual de los católicos, que continúan siendo bombardeados por los
modernistas para, sobre las ruinas de la Iglesia católica, construir su Iglesia
sinodal, es decir: democrática, inclusiva con los otros credos, y sodomita.
Esta imagen nos lleva a hablar de lo que nadie habla. ¿Por qué emitir este
documento? ¿Cómo es posible que los conciliares digan una y otra vez –y lo dijo
desde que asumió León XIV- que buscan la unidad en la Iglesia, y en cambio no
hacen más que generar conflictos? Pues bien, lo que buscan –y esto los
conservadores y semi-tradis no lo entienden todavía, y seguirán sin entenderlo-
es la unidad en la Iglesia sinodal, no la unidad en la Iglesia católica. Buscan
la unidad dentro de la nueva iglesia surgida del Concilio. Y saben que esa
unidad debe darse por fuera de la doctrina católica, puesto que no pueden
convivir juntas la doctrina católica y la doctrina modernista. De allí la imposible
convivencia de la Misa católica o tradicional y de la misa Novus Ordo sólo de
apariencia católica. Hay un margen mínimo de tolerancia, o había hasta ahora,
pero ese margen se va estrechando cada vez más. Y este último documento antimariano
–pero de astuta apariencia devoto de la Virgen- ha venido a dejarlo claro. Se
han metido con lo más preciado por ese “pueblo fiel” al que dicen querer
apacentar. ¿Qué queda después de eso?
¿Con que no podrán meterse? ¿La neo-FSSPX cree que será respetada y le
serán dados obispos verdaderamente tradicionales? “Mater Populi fidelis” es una
guillotina disimulada. Sólo los estúpidos pueden tragarse el cuento de las
buenas intenciones vaticanas. El autor del documento vaticano es un depravado
sexual y la agenda LGBTQ avanza en las diócesis muy alegremente. Cardenales y
obispos, callan.
Creemos, por esto, que esta es una fase más, más dolorosa y posiblemente una de las últimas, de “los errores de Rusia” obrando dentro, y a la vez fuera de la Iglesia, de consuno. Errores que no son hoy precisamente “de Rusia”, pero vamos a tratar de hacernos entender.
Los “errores de Rusia”
El 13 de
julio de 1917, en su tercera aparición en Fátima, la Santísima Virgen mencionó
los “errores de Rusia”, y anticipó que volvería para pedir la consagración de
esta nación (cosa que hizo el 13 de junio de 1929). Faltaban entonces 117 días
para que la Revolución bolchevique se apoderase de Rusia.
Comprender
“los errores de Rusia” solamente como el comunismo soviético, el marxismo-leninismo,
es reducir el problema a una formulación específica aplicable sólo en una muy
precisa circunstancia histórica. Pero el comunismo, como meta final e idea del
control absoluto de Satanás sobre la humanidad, es el producto consumado de la
Revolución, que por sí misma se expande para ir tomando, como un cáncer toma
todo tipo de tejidos y órganos, todo tipo de sociedad, donde ya no queden
defensas contra la enfermedad. Es decir, donde no quede ningún rastro de
cristianismo.
Por eso
creemos que se debe ir al fondo de esta cuestión: su concepto teológico, en
cuanto se trata de la guerra de la Santísima Virgen, como podemos advertirlo
desde el Génesis hasta el Apocalipsis, contra la Serpiente, es decir, contra Satanás.
Cuando se
estudia el entramado de la Revolución a lo largo de los siglos, la marca de la
serpiente se advierte en los personajes y grupos que están detrás del telón,
“entre bastidores”. Los “errores de Rusia” (en aquel entonces) son hoy los
errores de todo Occidente. Aparecen como menos brutales y más suaves, pero por
eso mismo más insidiosos y letales.
Y cuando
decimos Occidente incluimos también al Vaticano que forma parte de él, sin la
menor resistencia a la adscripción de tales errores, pues fue en su propia
“Revolución de octubre”, el Concilio Vaticano II, que el contagio tomó lo más
importante del cuerpo: la cabeza.
El mesianismo judío anticristiano y
naturalista, financiado por los banqueros internacionalistas, implementado por
las logias masónicas, en función del gobierno mundial del Anticristo: tales son
los errores que, primero implementados a través de la Revolución bolchevique,
luego –de un modo diferente- han pasado a establecerse en Occidente.
El
naturalismo está detrás tanto del socialismo como del liberalismo, detrás del judío
Karl Marx como del protestante John Stuart Mill. Desconoce tanto el soberano
dominio de Dios sobre sus criaturas como las consecuencias necesarias de la
Encarnación de Cristo, así como niega el estado de pecado original. La gracia
no hace falta por lo que, por medios distintos, se llega al objetivo final: el
encumbramiento del hombre, que no será otra cosa que el del Anticristo. El
obstáculo es el catolicismo.
Claramente
identificaban los católicos al enemigo antes del nefasto Concilio Vaticano II:
“El
naturalismo […] es la afirmación de la autonomía y de la autosuficiencia de la
naturaleza humana […] Satanás ha sido el primer naturalista (afirmando la
autonomía y la autosuficiencia de la naturaleza angélica) […] Por oposición al
reino sobrenatural de Cristo, Satanás establece su reino naturalista (o
anti-sobrenatural) y busca extenderlo por medio de dos organizaciones visibles:
de una parte la nación judía, en tanto que promotora de un mesianismo terrestre
y económico, de otra parte la masonería”(Civiltà
Cattolica, 1° Marzo 1947).
Es sabido
que la judeo-masonería estaba detrás de la Revolución comunista. Muy bien lo supo
decir Juan Vázquez de Mella:
“El judaísmo, con la
astucia prodigiosa de la raza y el odio a la Iglesia, que demuestra
providencialmente, como una profecía siempre viva, con su existencia, profesa
ahora un «mesianismo» que nada tiene que ver con el antiguo. No es el soberano
conquistador que había de sujetar todos los pueblos al de Israel, ni el
Dios-Hombre que crucificó, y cuya divinidad demuestra con la ruina del templo,
la destrucción del sacerdocio y la dispersión, casi dos veces
milenaria, sino un Mesías colectivo, que es el pueblo judío mismo, que
tiene, según sus grandes rabinos, la misión de convertir en un feudo a todos
los pueblos, singularmente a los cristianos, a los que no queda más esperanza
que la de ser esclavos e instrumentos suyos.
Y el programa se cumple de
dos maneras: por medio de la dominación intelectual y por la económica. Todas
las ideas revolucionarias han nacido o se han desarrollado en la sinagoga y a
través de la logia. El panteísmo moderno procede de Espinosa; el fenomenismo
escéptico, de David Hume, y el positivismo tomó forma en Feuerbach y en Littré.
El colectivismo con apariencias científicas fue formulado por dos judíos:
Carlos Marx y Fernando Lasalle. Hasta el liberalismo constitucionalista,
que fue el derecho político de una burguesía escéptica, fue sistematizado por
un judío suizo, Benjamín Constant. El individualismo económico tenía también
ese origen semita en sus fundadores.
Al lado de la dominación
intelectual, creció la económica por medio de la Banca, que dirigieron los
Rothschild, y que todavía tiene sus principales resortes en manos judaicas. Al
lado de esa dominación plutocrática fomentaron la demagógica. Por un lado,
multiplicaban con los empréstitos y sujetaban a su dominio a los Estados. Por
otro, arruinaban el capital antijudaico y se levantaban contra el de los
obreros, que creían destruir un tirano cuando llevaban otro más fuerte sobre
sus espaldas.
El movimiento bolchevique
tiene origen, impulso y dirección judaica. Lenin y Trotsky son judíos, como lo
era Rosa Luxemburgo y sus compañeros de Alemania, y lo eran los principales
agentes revolucionarios en Austria y Hungría”.
(Juan Vázquez de
Mella, EL PENSAMIENTO ESPAÑOL, 27 de diciembre de 1919).
Ese
programa se está cumpliendo ante nuestros ojos. Las Actas del Primer Congreso
Antimasónico Internacional declaran lo siguiente:
1. Que la
Masonería es una secta religiosa y maniquea: que la última palabra de sus
secretos y de sus misterios es el culto de Lucifer o Satán, adorado en las tres
logias como el Dios Bueno, por oposición al Dios de los católicos, que los
iniciados blasfemadores llaman el Dios Malo.
2. Que el
demonio, inspirador de las sectas masónicas, sabiendo que no ha de llegar jamás
a hacerse adorar directamente por la generalidad de los hombres, procura
infiltrar en las almas, por medio de la Masonería, el germen del naturalismo,
que no es otra cosa que la completa emancipación del hombre respecto a Dios.
3. Que
para implantar en el mundo ese naturalismo impío, la Masonería se esfuerza en
acostumbrar a los hombres a colocar en el mismo pie de igualdad todas las
religiones, la única verdadera y las falsas; sustituía a la atmósfera católica
la atmósfera masónica, por medio de la prensa y la escuela sin Dios.
4. Que el
medio particular de que se sirva la Masonería para perder las almas afanosas de
lo sobrenatural, pero no suficientemente preparadas para el maniqueísmo
luciferiano, es excitarlas a que se entreguen a las prácticas perversas del
espiritismo.
5. Que la
Masonería es también una secta política, que procura apoderarse de todos los
gobiernos, para hacer de ellos ciegos instrumentos de su acción perversa, y que
trata también de sembrar por doquiera la rebelión.
6. Que el
objeto de la Masonería, sembrando la revolución por todos los ámbitos del
globo, es el establecimiento de la República Universal, basada sobre la
rebelión contra la soberanía divina, sobre la destrucción de las libertades y
las franquicias locales, sobre la abolición de las fronteras y la perversión
del sentimiento patriótico, sentimiento que después del amor de Dios, ha
inspirado al género humano sus más bellas acciones, sus más nobles sacrificios,
sus más heroicas abnegaciones.
7. Que la
Masonería prosigue su lucha contra la Iglesia, introduciendo en los pueblos
cristianos una legislación anticristiana.
8. Que la
Masonería es directamente responsable del socialismo moderno, porque ha
sustituido al ideal cristiano de la felicidad social su ideal propio; a la
jerarquía social cristiana, gobernada por la justicia y templada por la
caridad, una pretendida igualdad de todos los hombres entre sí; porque haciendo
olvidar a los hombres que es en la vida futura donde será recompensado cada
cual según sus obras, les enseña que la felicidad sólo se halla en los goces
materiales de acá abajo y que todos tienen un derecho estricto a una parte
igual de esa felicidad.
9. Que la
filantropía masónica, opuesta a la caridad cristiana, siendo, como es, el amor
puramente natural de unos hombres a otros hombres, es incapaz de servir de lazo
entre la humanidad y Dios; y que, además esta filantropía masónica no se ejerce
sino respecto a los masones mismos, y muy a menudo, en detrimento de la
sociedad civil.
10. Que
para corromper irremediablemente la familia, la Masonería procura corromper a
la mujer que no sólo hace ingresar, siempre que puede, a las mujeres en sus
logias, sino que es alma de este movimiento llamado feminista o de la
emancipación de la mujer, destinado a introducir la perturbación y el desorden
en las familias, por el vago deseo de una reforma completamente inasequible.
11. Que
para acostumbrar a los hombres a prescindir de la Iglesia en la vida social, la
secta procura hacer suprimir las fiestas religiosas y los días consagrados a la
santificación de las almas y el descanso de los cuerpos, para sustituirlos por
las fiestas meramente civiles.
(Actes du
1er. Congrés Antimaconnique Internacional, t. I, págs. 333 38, en Historia del Anticristo, de Alberto
Ezcurra Medrano).
Resulta
interesante observar de qué modo una fecha que en la historia se repite nos
permite trazar un cuadro de esta guerra absoluta (hoy le llamarían global)
entre Cristo y Belial o entre la estirpe de la Mujer y la de la serpiente. Y
esto va dado en el contexto de una guerra a un mega nivel pues concierne
siempre a los grandes Imperios mundiales y la pequeña Iglesia católica,
universal en su alcance y poder, pero a la vez por su fuerza terrena y
política, muy poco influyente ante los poderes del César.
Anotamos
algunos hechos y agregamos fechas conexas de suma importancia (para ver más
detalles sugerimos leer nuestro libro Agenda
Fátima II):
13 de junio de 323 a.C. según
algunos historiadores en esta fecha ocurrió la muerte de Alejandro Magno,
siendo la CAÍDA DEL MAYOR IMPERIO DEL MUNDO.
13 de junio de 313: Edicto
de Milán. VICTORIA CRISTIANA SOBRE EL MAYOR IMPERIO DEL MUNDO.
13 de junio de 1912: El papa
san Pío X recomienda la devoción del primer sábado de mes en honor de la Santa
Virgen. ANTICIPO DE LA DEVOCION AL CORAZON INMACULADO QUE SALVARA AL MUNDO.
13 de junio de 1917: Segunda
aparición de la Santísima Virgen en Fátima: “Jesús quiere ESTABLECER EN EL
MUNDO LA DEVOCIÓN A MI CORAZÓN INMACULADO”.
10 de diciembre de 1925: Nuestra
Señora se aparece a sor Lucía y le revela la DEVOCIÓN DE LOS CINCO PRIMEROS
SÁBADOS DE MES A SU INMACULADO CORAZÓN que traerá la paz al mundo.
11 de diciembre de 1925: Pío XI
publica la encíclica Quas primas que
establece la fiesta de CRISTO REY, no sólo de los individuos sino también DE
LAS NACIONES DE TODO EL MUNDO. Inevitable vincular el triunfo del Corazón
Inmaculado al triunfo del Sagrado Corazón de Cristo Rey.
13 de junio de 1929: La Santísima
Virgen PIDE LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA, EL MAS GRANDE IMPERIO DEL MUNDO (dominado
por judíos) a su CORAZÓN INMACULADO. ¿Se vincula la conversión de Rusia a la
conversión de los judíos?
13 de
junio de 1944: Se lanza sobre
Inglaterra el primer misil de crucero de la historia, y su uso por parte de
Alemania representó el comienzo del empleo de armas automáticas no tripuladas
para atacar objetivos a larga distancia, en el transcurso de la MAYOR GUERRA
MUNDIAL DE LA HISTORIA, que ganaron las fuerzas aliadas judeo-masónicas. Los
“errores de Rusia” iban a esparcirse más aún.
13 de junio de 1960: Reunión
en el Vaticano entre Jules Isaac y Juan XXIII: COMIENZA EL CAMBIO en la Iglesia
que DOMINA ESPIRITUALMENTE SOBRE EL MUNDO, por parte de la SINAGOGA DE SATANAS
QUE DOMINA LOS IMPERIOS DEL MUNDO. Los judíos dentro de la Iglesia. Los
“errores de Rusia” corromperán la Iglesia por dentro.
29 de
octubre de 1963: El
Concilio Vaticano II rechazó dedicar un documento propio y separado a la
Virgen María. Con fines ecuménicos, para agradar a los protestantes, mas CON LA
SERPIENTE DETRÁS INSPIRANDO A LOS PADRES CONCILIARES A DISMINUIR EL PAPEL DE LA
SANTÍSIMA VIRGEN EN LA IGLESIA. Los “errores de Rusia” se consolidarían a
partir de entonces.
13 de abril de 1965: Se reza
en Roma por vez primera la nueva misa normativa, engendro que dará lugar al
Novus Ordo Missae en 1969. LA SERPIENTE TEME AL SANTO SACRIFICIO DE LA MISA, de
allí el mover a los jerarcas modernistas para reemplazarla por un culto
aceptable a los protestantes y judíos.
13 de abril de 1986: JUAN
PABLO II SE CONVIERTE EN EL PRIMER PAPA EN VISITAR UNA SINAGOGA. Allí se
refirió a los judíos como “nuestros hermanos mayores en la fe” —una
frase que se hizo célebre y marcó un cambio en las relaciones entre la Iglesia
y el judaísmo tras el Concilio Vaticano II y su declaración Nostra Aetate
(1965). Nueva afrenta al Corazón Inmaculado de María, pues la Virgen señaló su
devoción y el rezo del santo Rosario como remedios contra el pecado y la
guerra, no el ecumenismo y diálogo interreligioso con los portadores de “los
errores de Rusia”.
16 de octubre de 2002: Juan
Pablo II firmaba la carta apostólica Rosarium
Virginis Mariæ. Esta carta, que pretende promover el rosario, está
impregnada de naturalismo de principio a fin. Considera el rosario como una
experiencia psicológica semejante a las oraciones y meditaciones de las
religiones no católicas. Entre las “mejoras” del rosario propuestas en este
espíritu, se encuentra el agregado de los “MISTERIOS LUMINOSOS”. ESTOS FUERON ELEGIDOS EXPRESAMENTE CON
SENTIDO ECUMÉNICO, PARA NO OFENDER A LOS PROTESTANTES; es decir, se hallan
enteramente descritos en los Evangelios y ninguno de ellos menciona explícitamente
a la Santísima Virgen. Esto
concuerda perfectamente con la intención manifiesta del papa de hacer que el
rosario sea más “cristocéntrico”, lo cual significa en la práctica que SE
VUELVE MENOS EXPLÍCITAMENTE MARIANO.[3]
13 de junio de 2012: Ese día
estaba estipulada la concreción del acuerdo-capitulación de la FSSPX comandada
por liberales con la Roma modernista. Una prelatura personal se le había
propuesto y para firmar ese acuerdo había viajado Mons. Fellay hasta el
Vaticano. La resistencia interna lefebvrista alarmó al Vaticano y el acuerdo se
truncó. La FSSPX es LA MAYOR CONGREGACION TRADICIONALISTA DEL MUNDO, por lo que
se hace necesario doblegarla. Comenzó su caída con una trampa referida a los
judíos. Resultado: el papa Benedicto XVI reafirmó la adhesión de Roma al
judaísmo talmúdico y la FSSPX se “limpió” y no volvió a hablar de ese tema
controvertido.
13 de junio de 2013:
Vladimir Putin afirmó públicamente que LA MAYORÍA DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO
COMUNISTA DE RUSIA, es decir EL MAYOR IMPERIO DEL MUNDO, ESTABA COMPUESTO POR
JUDÍOS.
13 de junio de 2019: La ONU
y el Foro Económico Mundial firman un Memorando de Entendimiento sobre una
asociación estratégica de ambos organismos internacionales, para ACELERAR
CONJUNTAMENTE LA SATÁNICA AGENDA 2030. Seis meses después surge la “pandemia”
de Covid-19 que PARALIZA TODO EL MUNDO Y CIERRA LAS IGLESIAS.
7 de octubre de 2023: En la
fiesta de Nuestra Señora del Rosario, reina de la paz, comienza la devastadora
guerra –más bien genocidio- de Israel contra Gaza. Objetivo mesiánico para
expandirse hacia el “Gran Israel”: “errores de Rusia” consolidados.
13 de junio de 2024: El
Vaticano publica el documento revolucionario llamado “El Obispo de Roma. Primacía y sinodalidad en los diálogos ecuménicos y
respuestas a la encíclica Ut unum sint”, tendiente a REFORMULAR EL PAPADO,
ya que considera que éste es un problema para la unidad con los otros
cristianos (herejes y cismáticos). Es la “auto demolición” de la Iglesia.
13 de junio de 2025: Dos
hechos ocurren este mismo día. Por un lado, ISRAEL LANZA UN ATAQUE CONTRA IRÁN.
Su primer ministro, el genocida Benjamin Netanyahu, afirma: “Hace unos
momentos, Israel lanzó la Operación León Creciente, una operación militar
dirigida a desmantelar la amenaza iraní a la supervivencia de Israel. Esta
operación continuará mientras sea necesario para eliminar este peligro”.
Mientras eso ocurría ad extra, ad intra Tel Aviv celebraba su TEL AVIV PRIDE PARADE, uno de los
eventos más grandes del año y uno de los desfiles LGBTQ más grandes del Medio
Oriente. Es el DESFILE DEL ORGULLO HOMOSEXUAL MÁS GRANDE DEL PAÍS Y DE TODO
ORIENTE MEDIO. Las autoridades municipales de Tel Aviv estimaron las cifras en
torno a 200.000 – 250.000 asistentes
en 2025, lo que lo convierte en el evento público masivo más concurrido de
Israel de este año.
Esto se
relaciona también con la revolución judeo-comunista bolchevique. La Revolución bolchevique de 1917 no solo
transformó la política y la economía de Rusia, sino que también tuvo un impacto
profundo en la moral, la vida familiar
y la sexualidad. En sus primeros años, los líderes revolucionarios
intentaron aplicar al terreno de las costumbres el mismo principio de ruptura
con la “opresión burguesa” que habían proclamado en lo económico y político.
Entre 1917 y 1920 se tomaron las siguientes medidas revolucionarias: 1.-Legalización del divorcio: se facilitó
enormemente, bastando la simple voluntad de una de las partes.2.-Abolición de las leyes contra la
homosexualidad (en 1917-1918): Rusia se convirtió en uno de los primeros
países en descriminalizarla.3.-Legalización
del aborto en 1920, siendo la URSS el primer país en el mundo en hacerlo.4.-Promoción del libertinaje sexual o “amor”
libre: teóricos como Alexandra Kollontái defendieron la idea de que las
relaciones sexuales debían ser libres de ataduras jurídicas y económicas. Todo
eso se mantuvo hasta la reacción de Stalin en los años 1930, que vio
perfectamente que esas medidas llevaban al país al caos y la disolución.
Finalmente:
7 de octubre de 2025: León
XIV firma la nota doctrinal Mater Populi
fidelis del Dicasterio para la Doctrina de la fe, que es dado a conocer el
4 de noviembre, donde, yendo contra la enseñanza de la Tradición y el
Magisterio de la Iglesia, SE RECHAZA EL TÍTULO DE CORREDENTORA Y MEDIADORA DE
TODAS LAS GRACIAS A LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA. Si hasta ahora se había
desplazado a la Virgen María en la consideración de los jerarcas conciliares,
esta vez directamente se la rechaza, se la “ningunea”. Objetivo: disminución de
la piedad popular hacia la Virgen, quitar un obstáculo (sí, la Virgen es un
obstáculo) a la unidad en el error con las falsas religiones. Aún no se ha prestado suficiente atención a
lo que dijo León XIV cuando el festejo de los 60 años de Nostra Aetate y el encuentro por la paz
en la afrentosa reunión interreligiosa en el Coliseo romano el reciente 28 de
octubre: “TODAS LAS RELIGIONES SON MADRES”. Si todas las religiones son madres, entonces la
Religión católica no es la única que tiene Madre o María no es la única Madre.
Ya no puede serlo puesto que Jesucristo no es el único camino de salvación para
estos apóstatas vaticanos. Hay muchas
madres y María es una más, es sólo la “Madre del pueblo fiel”. De allí que no
quieran llamarla Corredentora ni Mediadora de todas las gracias.
En
definitiva: la Sinagoga de Satanás, que pretende mover el mundo a voluntad, le
inocula a éste y a la Iglesia el virus del naturalismo, que trae luego los
errores del panteísmo, el ateísmo y el materialismo.[4] Con este naturalismo vienen las
consecuencias en la conducta moral: el divorcio, el aborto, el libertinaje
sexual y la sodomía, el fin de la propiedad privada (que queda en manos de una
ínfima y poderosa élite que controla la emisión de dinero, los medios de
comunicación y los recursos naturales), el control social mediante “emergencias
sanitarias” y, por supuesto, la persecución religiosa a los cristianos (con o
sin sangre) que no aceptan este estado de cosas. Y por miedo a este rechazo o
respeto humano, los jerarcas y miembros de la Iglesia fueron aceptando poco a
poco todos estos errores y consecuencias inmorales. ¿Divorciados vueltos a
casar?, adelante, les dice papa Francisco, pueden llegar a comulgar, con
discernimiento [5];
¿aborto?, hay muchos promotores del aborto entre los obispos y sacerdotes y los obispos de Estados Unidos financian a una
organización que promueve el aborto[6]
(y antes aprobaron una versión de la Biblia donde se blanquea el pecado
sodomita); ¿sodomía y perversión sexual?, están a la orden del día, se bendicen
las parejas homosexuales y hasta un grupo LGBTQ desfiló libremente dentro de la
basílica de san Pedro en el Jubileo santo; la Agenda 2030, la Agenda del
“cambio climático”, y los poderosos del mundo son sostenidos, promovidos y
“apacentados” por los papas y jerarcas de Roma. No se promueve directamente el
ateísmo, pero cuando León XIV –siguiendo a todos los papas conciliares- pone a
todas las religiones en pie de igualdad y afirma con una sonrisa que “ser una
Iglesia sinodal significa reconocer que la verdad no se posee, sino que
se busca juntos, dejándonos guiar por un corazón inquieto enamorado
del Amor”, y que “ nadie posee toda la verdad ; todos debemos
buscarla humildemente y buscarla juntos” [7]
y “Comprometámonos a construir una Iglesia que sea totalmente sinodal,
ministerial y atraída por Cristo y, por lo tanto, comprometida a servir al
mundo”, evidentemente promueve implícitamente el indiferentismo
religioso, el total subjetivismo, el agnosticismo y finalmente el ateísmo.
Pero, si la iglesia sinodal es una iglesia teilhardiana-panteística, entonces
ese encuentro de todas las religiones –bajo el paraguas noáquida fabricado por
los judíos- es mucho más factible: han eliminado aquello que los separaba, la
Verdad. No hay verdad y no hay error, hay diálogo y búsqueda constante, para
caminar juntos hacia la unidad panteística, lo que Bergoglio llamaba un
“poliedro”.
Así pues,
lo que está haciendo la Iglesia conciliar-sinodal, es negar la necesidad de la
gracia y por lo tanto de la Iglesia católica, del Sacrificio de Cristo, del
mismo Cristo como Redentor y, por lo tanto, de María Corredentora.
Es cierto
que el documento leo-tuchoísta se refiere y más de una vez a Cristo como único
Mediador y Redentor:
“El
texto, al mismo tiempo que clarifica en qué sentido son aceptables, o no, algunos
títulos y expresiones que se refieren a María, se propone profundizar en los
adecuados fundamentos de la devoción mariana precisando el lugar de María en su
relación con los creyentes, a la luz del Misterio de Cristo como único Mediador
y Redentor. Esto implica una profunda fidelidad a la identidad católica y, al
mismo tiempo, un particular esfuerzo ecuménico”.
Pero, de
acuerdo a lo que dice en sus declaraciones León XIV, de que la verdad no se
posee, y de que hay que buscarla con las demás sectas religiosas, lo que dice
el documento, ¿sería o no verdad? No lo es porque los modernistas no sólo son
subjetivistas, sino que ya no entienden la redención en el buen sentido
católico de rescatar a los pecadores de las garras del diablo por el sacrificio
expiatorio y propiciatorio de Cristo para, recuperada la gracia, poder entrar así
al cielo. Para estos herejes la redención o salvación es una toma de conciencia
de que todo hombre está identificado con Jesús, por el solo hecho de ser
hombre. El Concilio Vaticano II puso las bases de una religión nueva
destinada principalmente a exaltar a la persona humana y a realizar la unidad
del género humano. En ese plan, la Madre de Dios nos recuerda, porque ella es
la Inmaculada Concepción, que todos nosotros somos pecadores. Eso es un estorbo
intolerable para el mundo. Su corredención, por lo tanto, vinculada como está a
la mediación de todas las gracias, nos recuerda precisamente que necesitamos la
gracia para salvarnos. Otra cosa muy molesta para el hombre orgulloso. Por lo
tanto, debe hacerse de la Virgen solamente una discípula que camina tras Jesús
de Nazareth: María de Nazareth. Si estuviera Bergoglio vivo la llamaría la
“madrecita del tango”. Cada religión es una madre, dice León, y nosotros
tenemos la “madrecita” que acompaña, pero, no exageremos sus títulos y sus
atribuciones. Bien pueden los budistas, los judíos, lo hindúes y demás
“religiones” pasarse sin María. Ese es el “particular esfuerzo ecuménico” que
menciona y pretende aplicar el documento de Tucho, que es incompatible con lo
que dice antes en la misma oración: “Esto implica una profunda fidelidad a la
identidad católica”. Una obvia mentira del prefecto cardenal erotómano experto
en sanar aplicando tiernos besos.
Como bien
explica el padre Nitoglia en un artículo de este mismo blog, hay una triple
prerrogativa mariana: “María
es Corredentora,
porque ha cooperado en la adquisición de la gracia; es Mediadora, porque
coopera en su distribución; es Dispensadora universal, porque administra
efectivamente todos los dones de Dios a las almas. Negar alguna de estas prerrogativas equivale a mutilar el designio
divino de la Redención. Por eso, el Magisterio, la Tradición y la razón
teológica coinciden en afirmar que la Corredención y la Mediación universal
constituyen los dos aspectos complementarios de la única misión mariana en el
orden de la gracia”.
En definitiva, se
expulsa a María del plan salvífico de Dios porque ya no es necesaria y es
peligrosa porque es Ella quien aplasta con su pie a la serpiente. La devoción popular por la
Santísima Virgen debe ser diluida en una afición sentimental. Golpear la
doctrina significa estropear la oración que pierde toda eficacia. El golpe
mortal contra la Misa, se repite ahora contra la Inmaculada.
Ipsa conteret
De tal
modo que, en este combate absoluto entre la Iglesia de Cristo y la Sinagoga de
Satanás, entre la Inmaculada y la Serpiente, Nuestra Señora señaló cuales eran
los errores a combatir y el modo de vencerlos. Pero, desgraciadamente, los
jerarcas de la Iglesia la han desoído, traicionado o afrentado, como acaba de
ocurrir ahora. Esta gente vil es incapaz de darse cuenta que a la Santísima
Virgen no se le falta el respeto impunemente, porque su Hijo es muy celoso de
su Madre.
Los
esbirros, los secuaces y los cómplices de la Sinagoga de Satanás están
acelerando su tarea de demolición de la Iglesia desde dentro, a la vez que el
mesianismo judío acelera lo que será el proceso de su derrota propiciando
catastróficas guerras en torno a Israel. Uno y otro frente han de resolverse
por modo de castigo, por no haber querido utilizar los últimos remedios que
Dios le había dado al mundo. Ya parece haberse acabado el tiempo, y se acaba un
ciclo malvado que dentro de la Iglesia llegará a cumplir 70 años en 2029, como
70 años duró el cautiverio de la Iglesia en Aviñón, 70 años el comunismo soviético
y 70 años el cautiverio de los judíos en Babilonia. El papa número 7 de este
ciclo ignominioso acelera, sin darse cuenta, el pronto cierre de este ciclo. No
creemos que termine a la manera en que Eliot lo imaginó hace exactamente cien
años en “Los hombres huecos”: “Así es
como se acaba el mundo, no con una explosión, sino con un quejido”. Será
mucho más espectacular que eso.
Triunfo asegurado
Un dato
nos parece llamativo: “El papa Benedicto XV instituyó en 1920 tres
Comisiones teológicas (una romana, una belga y una española) para estudiar la
cuestión, y concedió el 21 de diciembre de 1921 la Fiesta de María Mediadora de todas las gracias, a celebrarse
el 31 de mayo en toda la Iglesia universal, al término del mes de María. Esta
fiesta fue reemplazada por la Fiesta de María Reina del mundo,
instituida por Pío XII el 11 de octubre de 1954 [hecho muy lamentable; curiosamente la fecha del cambio de la misa fue la
misma en que iba a principiar el nefasto Vaticano II]; sin embargo, en las misas pro aliquibus locis
permanece la misa María Mediadora de todas las gracias, que puede
celebrarse el 8 de mayo”.
Pues bien, 8 de
mayo es la fecha de elección de este papa, que ahora repudia ese título mariano,
acechando de ese modo el talón de María.
Sin embargo, ya
fue dicho: “Ipsa conteret caput tuum” (“Ella te aplastará la cabeza”, Gén. III, 15). El enemigo será
vencido, y muy pronto. Nuestra Señora, la Corredentora y Mediadora, nos lo
aseguró: “Al fin mi Inmaculado Corazón triunfará”.
NOTAS:
[1] Bastante
resistencia tuvo el título de la Virgen como “Madre de la Iglesia” en el último
Concilio. Pero eso parece que ya ahora es demasiado y, como se hizo de la
Iglesia el “Pueblo de Dios”, ahora demagógicamente se hace de la Virgen,
mediante un lenguaje sentimental, “Madre del Pueblo fiel”. A los izquierdistas,
progresistas y democráticos les encanta abusar de la palabra “pueblo” para
engañar mal verdadero “pueblo de Dios”, lo que no tienen problemas en llamar a
la Virgen Corredentora y Mediadora. Va de suyo que este título nuevo es
coherente con la nueva “Iglesia sinodal” que se está formando sobre las ruinas
de la Iglesia tradicional.
Pero el
contenido de este deplorable documento no es nuevo. Ya en el XII Congreso
Mariológico Internacional en Polonia, en 1997, al estudiar la posibilidad de la
definición de los títulos marianos de Mediadora, Corredentora y Abogada, y tras
varias reuniones de trabajo, la Comisión publicó una declaración donde se hacen
las siguientes afirmaciones:
“Los
títulos propuestos –Corredentora, Mediadora y Abogada- resultan ambiguos ya que
pueden entenderse de diversos modos. Nos ha parecido además que no es
conveniente abandonar la línea teológica seguida en el concilio Vaticano II, el
cual no ha querido definir ninguno de ellos: no utilizó en su magisterio
el título de Corredentora; y de los títulos Mediadora y Abogada ha hecho un uso
muy sobrio (Lumen Gentium 62) Aunque se atribuyeran a esos títulos unos
contenidos por los que se pudiera aceptar su pertenencia al depósito de la Fe,
su definición, en la actual situación, no resultaría, sin embargo,
teológicamente conveniente, en cuanto que tales títulos y las doctrinas
inherentes a ellos, necesitan todavía una ulterior profundización y una
renovada perspectiva trinitaria, eclesiológica y antropológica. Finalmente, los
teólogos, especialmente los no católicos, se han mostrado sensibles a las
dificultades ecuménicas que implicaría una definición de los susodichos títulos”.
(Osservatore Romano, 4 de junio de 1997).
[2] https://agendafatima.blogspot.com/2025/11/maria-corredentora.html
https://agendafatima.blogspot.com/2025/11/fremet-et-tabescet-proposito-de-la.html
https://www.infocatolica.com/blog/praeclara.php/2511050933-leyendo-mater-populi-fidelis
https://www.infocatolica.com/blog/praeclara.php/2511080605-title
https://nonpossumus-vcr.blogspot.com/2025/11/mons-schneider-reacciona-ante-la.html
https://nonpossumus-vcr.blogspot.com/2025/11/mater-populi-fidelis-contra-el.html
[3] “El
resultado de este cambio de orientación es que se desvía poco a poco la
atención de los fieles de la redención, concebida como el rescate de las almas
de los pecadores, como el precio del pecado que debía pagarse, la satisfacción
por la ofensa hecha a Dios. La nueva teología llamada “del misterio pascual”
considera que eso no es necesario, que Dios no es tan infantil como para exigir
el pago de un rescate por los pecados y, por consiguiente, que basta con
meditar la manifestación del amor de Dios, de su gloria o de su misericordia.
Porque
“cada uno de estos misterios es una revelación del Reino ya presente en la persona
de Jesús” (Rosarium Virginis Mariae, § 21). La consecuencia de la
recitación de estos misterios luminosos es el marchitamiento del rosario, la
pérdida de su carácter mariano explícito y el desvío de nuestra atención de la
unión con el acto redentor de Cristo, acto que únicamente puede salvarnos de
nuestros pecados. Poco a poco, el rosario se volverá vacío y estéril, y dejará
de ser recitado”.
https://agendafatima.blogspot.com/2025/11/deben-rezarse-los-misterios-luminosos.html
[4] Cf.
Cardenal Pie, El orden sobrenatural, Ed.
Iction, 1981, p. 111 y ss.
Del
análisis de Néstor Martínez estos párrafos nos parecen relevantes en el
documento vaticano:
“Paradójicamente, eliminar
la gracia creada y dejar solamente la inhabitación trinitaria es eliminar
todo contacto real entre Dios y el hombre, o bien, identificar
panteísticamente a Dios con el hombre.
“En
cambio, “Mater populi fidelis” dice: “La misma gracia creada,
entonces, no actúa como un “intermediario”, sino que es un efecto directo de la
amistad que Dios concede al tocar directamente el corazón humano. Y así,
siendo Dios quien obra la transformación de la persona cuando se entrega como
amigo, no hay intermediario entre Dios y el ser humano transformado.
Sólo Dios es capaz de penetrar tan profundamente para santificar, hasta
hacerse absolutamente inmediato, y sólo Él puede hacerlo sin
anular a la persona.»”
Agregamos nosotros para ir más allá del documento
en sí: los modernistas no sólo convierten los dogmas en símbolos, sino también
los sacramentos, vaciados. Dios puede actuar directamente, ergo la Iglesia y
los sacramentos se hacen innecesarios en sí, y son más bien manifestación
exterior de una pertenencia. Y lo del panteísmo es claro en el transcurso de la
unidad de todas las religiones, porque el hombre tiene una dignidad infinita, lo
cual va de la mano con la condenación de la pena de muerte, etc.
Si como enseña el P. Calderón la religión del Vaticano
II es un humanismo cristiano, entonces el ser humano es alguien divino, porque
en eso se centra una religión, en un ser divino. Entonces no es necesaria una
“Mediadora de todas las gracias” ni una “Corredentora”, además de que son
expresiones netamente católicas que nos separan de los “hermanos separados” y
de todas las demás religiones. Ese es el
porqué de las reuniones interreligiosas: todos los hombres tienen una chispa
divina en su interior (gnosticismo – nueva era), lo que hace la redención es
hacérselo descubrir.
La iglesia sinodal en ciernes es una iglesia
panteística-teilhardiana, que tiene que despojarse de todo resabio católico.
Todo esto ya está explicado en Pascendi, los
ultramodernistas ponen en acción lo allí denunciado (también en el Syllabus de
Pío IX).
[5] Amoris Laetitia — Exhortación
apostólica del Papa Francisco (2016)
[6]https://infovaticana.com/2025/11/12/los-obispos-de-estados-unidos-financian-a-una-organizacion-que-promueve-el-aborto/
[7] León XIV
enseña lo contrario que enseñaba su predecesor León XIII, en su Encíclica Divinum illud munus escrita en
1897: “Así se cumplió plenamente aquella última promesa de Cristo a sus
apóstoles de enviar al Espíritu Santo, quien había de completar y, por así
decirlo, sellar el depósito de la doctrina que les fue confiado bajo su
inspiración. 'Aún tengo muchas cosas que decirles, pero ahora no las pueden
sobrellevar; pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él les
enseñará toda la verdad' (Jn 16:12-13). Porque Él, que es el
Espíritu de la verdad, puesto que procede tanto del Padre, que es la Verdad
eterna, como del Hijo, que es la Verdad sustancial, recibe de cada
uno tanto su esencia como la plenitud de toda la verdad. Esta verdad la
comunica a su Iglesia, protegiéndola con su ayuda todopoderosa para que
nunca caiga en el error, y ayudándola a fomentar cada día más los gérmenes de
la doctrina divina y a hacerlos fructíferos para el bienestar de los pueblos.”
