Por el triunfo del Inmaculado Corazón de María

martes, 7 de diciembre de 2021

LA REINA ESTER SALVÓ DEL EXTERMINIO AL PUEBLO JUDÍO, LA VIRGEN MARÍA SALVARÁ A SU PUEBLO DEL NUEVO EXTERMINIO

 

LA REINA ESTER SALVÓ DEL EXTERMINIO AL PUEBLO JUDÍO, LA VIRGEN MARÍA SALVARÁ A SU PUEBLO DEL NUEVO EXTERMINIO

 

 


  “¡Qué grande es el poder de la oración! Se diría que es como una reina que en todo momento tiene acceso libre al rey y que puede alcanzar todo lo que pide”.

Santa Teresa del Niño Jesús, Ms. C, 25.



Por FLAVIO MATEOS

 

Mira a la estrella, invoca a María”, nos dice San Bernardo en su preciosa y poética invocación: “¡Oh tú que te sientes lejos de la tierra firme, arrastrado por las olas de este mundo, en medio de las borrascas y de las tempestades, si no quieres zozobrar, no quites los ojos de la luz de esta estrella, invoca a María!”.

Y puesto que nos encontramos todos en esa zozobra, en medio de la peor tempestad que se pueda recordar, donde la nave de la Iglesia parece a punto de hundirse o ser devorada por la gran bestia marina, mientras el mundo orgulloso y prepotente parece que va a aplastarnos, ¿qué mejor y más necesario que invocar a la Estrella que es María? Veamos entonces este signo que el Cielo nos ha querido dar y no lo pasemos por alto: la estrella que tiene en su manto Nuestra Señora del Rosario de Fátima. En cada aparición ostentaba esta estrella y podemos verla en su bella imagen en el santuario de Fátima. ¿Cuál es su significado?

Conforme al libro Fatima: The Signs and Secrets, por Marianna Bartold, de 2014, la estrella nos remite al Libro de Ester y éste es como un resumen del oficio singular de la Sma. Virgen en la historia de la salvación. La reina Ester fue una gran figura o tipo de nuestra Reina la Virgen María. Entre las muchas mujeres que son tipos de figuras de la Virgen, Ester es la más importante por tres razones: intercedió por su pueblo; su Estrella aparece en el vestido de Nuestra Señora; y el número "13" es fundamental para su historia”

Todas las apariciones de Fátima, excepto la de Agosto donde los niños estaban secuestrados por las autoridades locales, se produjeron en días 13. Ya en el Antiguo Testamento, el número 13 había cobrado protagonismo histórico. El día 13 de Adar es fundamental en la historia de Ester. Como se sabe, la Tradición católica ve en Ester una figura de la Santísima Virgen María, ya que Ester intercedió para salvar a su pueblo, mientras la Virgen es la intercesora, auxilium christianorum, para la salvación del pueblo cristiano. Se dice de Ester “Ester fue llevada al rey Asuero, a la casa real,… El rey amó a Ester más que a todas las mujeres, y ella halló gracia y favor ante él más que todas las jóvenes. Puso la diadema real sobre su cabeza y la hizo reina en lugar de Vasti” (Est. 2, 16-17).  Habiendo sido elevada a Reina por el rey Asuero (Jerjes), pues la anterior reina había desobedecido al rey (Vasti, figura de Eva), Ester intercedió por su pueblo cuando el primer ministro Amán (figura del Anticristo) lanzó un edicto, aprobado por el rey, para exterminar a todos los judíos. Ante esta situación desesperada, Ester mandó a Mardoqueo (había adoptado a Ester como hija, Mardoqueo era una destacada figura del pueblo judío) hacer ayunos y oración para impetrar la misericordia de Dios. Así fortalecida y confiada, Ester descubrió al rey su origen judío y obtuvo su gracia, y éste decidió salvar a su pueblo. Por el contrario, fue colgado Amán del mismo patíbulo que se había preparado para Mardoqueo. Éste fue colocado luego en el lugar de Amán, quedando como segundo del reino, algo así como un vicario del Rey, por lo que también puede considerarse su relación con el vicario de Cristo y la importancia que el Sumo Pontífice romano tiene en esta historia: no puede prescindirse de él. En Ester 2,20 se dice además: “Ester cumplía las órdenes de Mardoqueo como cuando estaba bajo su tutela”, lo cual nos hace pensar en que la Sma. Virgen cumplirá las órdenes del Vicario de Cristo, en cuanto éste haga la consagración de Rusia como fue pedida. Por otra parte, puede considerarse a Amán, queriendo derrocar al monarca, como figura también de un mal vicario de Cristo que conspira contra Cristo Rey, hasta que por intercesión de la Sma. Virgen es derrotado.

Luego de su salvación el pueblo judío fue autorizado a vengarse de sus enemigos el mismo día en que según el edicto de Amán, debía ser aniquilado en el reino de los persas. Ese día fue el 13 de Adar, décimo segundo mes del año, que corresponde a nuestro febrero-marzo. De tal manera que el 13 de febrero fue el día de la liberación del pueblo judío y la venganza contra sus enemigos.

Ahora bien, la autora del libro que citamos ha hecho una correlación muy interesante, entre esta fecha del 13 de febrero (13 de Adar), con el 13 de febrero de 2005, fecha de la muerte de Sor María Lucía de Jesús y del Corazón Inmaculado, es decir, la Hna. Lucía de Fátima (que en portugués se dice Lúcia). Es posible que esa misma fecha Dios nos haya querido dar un mensaje de esperanza en nuestra liberación, y que la estrella que ostenta Ntra. Sra. de Fátima en su túnica corresponda simbólicamente a su misión sublime que remite a esa figura de la suya que fue la de Ester, ya que además este nombre significa “estrella”. Recordemos que a la Sma. Virgen se la invoca también como “Stella matutina”, estrella de la mañana. La Hna. Lucía falleció justo en vísperas del primer Domingo de Cuaresma, el tiempo litúrgico dedicado a la oración y la penitencia. Como dijimos antes, Ester mandó a Mardoqueo se hiciesen ayunos y oraciones para obtener la salvación de su pueblo. La Virgen ha mandado lo mismo. Pero, como indicó la Hna. Lucía, ya no debía esperarse que este llamado nos llegase a través de los Obispos y autoridades de la Iglesia, así que ella misma se hizo eco del mensaje de la Virgen, y el día y tiempo de su fallecimiento parecieran remarcarlo para que no se nos olvide.

Podemos sin dudas ver un lazo entre el libro de Ester y lo que está ocurriendo hoy en el mundo: se ha lanzado un plan de exterminio por parte de Satanás y sus agentes de la Contra-Iglesia, los globalistas utópicos que pretenden reducir la población mundial eliminando a una gran parte de ella, por muy diversos medios, manipular al resto que quede con sus sofisticados medios tecnológicos, y acabar de una buena vez con la religión católica y más aún, con toda noción de lo sobrenatural y vestigio del orden natural creado por Dios. Los acontecimientos se suceden vertiginosamente y la urgencia que tienen los enemigos de Dios los está llevando a apresurar sus medidas criminales en todo el mundo. En esta situación donde todos los medios humanos están contra nosotros, donde como el pueblo judío de aquel entonces, estamos amenazados y sin recursos, sin armas, sin caudillos,  en definitiva, perdidos, sólo María, la Madre de la Misericordia, la Medianera de todas las gracias, puede interceder por nosotros para salvarnos, porque Ella es la Omnipotencia Suplicante cabe Dios. Como dice San Bernardo: “Sólo se abstenga de alabarla el que, al llamarla en las tribulaciones, no fue escuchado”. Y Santo Tomás: “Es por tanto necesario que quien desee alcanzar gracia de Dios se acerque con devotísimo corazón a esta mediadora, porque siendo reina de misericordia y no teniendo absolutamente parte alguna en el reino de la justicia, nada podrá negar al que le pide”(Salut. Angel. Exp. II).

No hay otra vía y el tiempo se va acabando. De allí la importancia de entender esto y poner por obra una Cruzada mundial de Rosarios al Corazón Inmaculado para que Dios al fin intervenga, antes de que sea demasiado tarde. Oración y penitencia deben hacer propicio nuestro deseo ante quien es el Auxilio de los Cristianos y cuyo oficio es la Misericordia. “Por tanto, invoca Tú al Señor, y habla por nosotros al rey, para librarnos de la muerte.” (Est. 15,3).

¡Madre, sálvanos!

 

¡Viva el Sagrado Corazón de Jesús y el Corazón Inmaculado de María!

 

UN LIBRO PARA ESTE TIEMPO

  “Fátima y Rusia”, por Flavio Mateos. Disponible en todo el mundo a través de Amazon y Mercado Libre.   Tomo I - 438 páginas ·     ...