El papa Francisco se reunió con la delegación del
Congreso Judío Mundial en un encuentro histórico en el Vaticano
Es la primera vez que se realiza un
evento formal realizado por una organización judía en el Palacio Apostólico
desde la fundación de la Iglesia Católica
22 de Noviembre de 2022
El papa Francisco recibió
hoy en el Vaticano, sede la Iglesia Católica, a una
delegación del Congreso Judío Mundial, en lo que ha sido catalogado
como un encuentro histórico que busca fortalecer los lazos entre judios
y católicos.
“A la luz del patrimonio que
compartimos, consideremos el presente como un desafío que nos une, como un
incentivo para actuar juntos”, dijo el líder de la Iglesia Católica mientras le
daba la bienvenida a la comitiva judía.
“Nuestras dos comunidades de fe
tienen encomendada la tarea de trabajar para que el mundo sea más fraterno,
combatiendo las formas de desigualdad y promoviendo una mayor justicia, para
que la paz no se quede en una promesa de otro mundo, sino que se convierta en
una realidad del presente en nuestro mundo”, agregó el sumo pontífice.
El Congreso Judío, es también
conocido como “Kishreinu”, lo cual significa en hebreo “Nuestro
Vínculo” y tiene como principal motivo fortalecer los lazos judeo-católicos en
todo el mundo.
El papa recibió a los líderes de las comunidades judías de más de 50 países en el Palacio Apostólico, en el que se sirvió comida kosher para compartir entre los presentes. Este es el primer evento formal realizado por una organización judía en el Vaticano desde la fundación de la Iglesia Católica.
“Quienes nos reunimos hoy aquí
estamos ansiosos por promover nuestro vínculo con la Iglesia Católica. Hoy
lanzamos el proceso de ‘Kishreinu’, que refuerza el futuro común de nuestros
dos pueblos y presenta una nueva etapa en el vínculo católico-judío”,
dijo Ronald S. Lauder, presidente del Congreso
Judío Mundial.
“No lo ignoramos. No olvidamos. Pero
miramos hacia adelante, juntos. Y qué mejor que todos los hijos de Dios vivan
juntos en paz, armonía y en la casa del señor, para siempre” agregó.
Asimismo, Kurt Koch, jefe
del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, destacó que,
“con nuestro patrimonio compartido, tenemos la responsabilidad común de
trabajar juntos por el bien de la humanidad, refutando el antisemitismo y las
actitudes anticatólicas y anticristianas, así como como todo tipo de
discriminación, para trabajar por la justicia, la solidaridad y la
paz, para difundir la compasión y la misericordia en un mundo a menudo frío y
despiadado”.
Por otra parte, el Papa pidió “hacer
lo humanamente posible” para detener los conflictos, como el que se vive
en Ucrania, “una guerra sacrílega que amenaza a
judíos y cristianos por igual”.
“Hoy, hermanos y hermanas, en muchas
regiones del mundo la paz está amenazada. ¡Reconozcamos juntos que la guerra,
cualquier guerra, es siempre, como sea y en todas partes, una derrota para toda
la humanidad!”, dijo el Papa en su discurso.
Y añadió: “¡Pienso en la de Ucrania,
una guerra sacrílega que amenaza a judíos y cristianos por igual, privándolos
de sus seres queridos, de sus casas, de sus bienes, de sus propias vidas!”.
“Sólo en la voluntad seria de
acercamiento y en el diálogo fraterno es posible preparar el terreno para la
paz. Como judíos y cristianos, tratamos de hacer todo lo humanamente posible
para detener la guerra y abrir caminos de paz”, añadió.
El pontífice dijo a
los representantes judíos que “la tarea de estas dos comunidades es trabajar
para que el mundo sea más fraterno, luchando contra las desigualdades y
promoviendo una mayor justicia, para que la paz no se quede en una promesa del
otro mundo, sino que ya sea una realidad en este”.
“Cuántos seres humanos, creados a
imagen y semejanza de Dios, están desfigurados en su dignidad, por una
injusticia que desgarra el planeta y representa la causa de fondo de tantos
conflictos, el pantano en el que se estancan las guerras y las violencias”,
lamentó el papa.
E invitó a los representantes del
Congreso Judío Mundial “a recuperar este pantano de injusticia que está
hundiendo la convivencia fraterna en el mundo, tanto como la devastación
ambiental compromete la salud de la tierra”.
(Con información de EFE)
Seguir leyendo:
Con un almuerzo
kosher en el Vaticano, el Papa Francisco recibió al Congreso Judío Mundial
En
el encuentro con el Papa estuvo presente Ronald Lauder, presidente del Congreso
Judío Mundial.
En
diálogo con la Agencia AJN, el Director Ejecutivo del Congreso Judío
Latinoamericano, Claudio Epelman, afirmó que se trata de ‘‘un punto de
inflexión en la relación entre judíos y católicos’’.
23 noviembre, 2022
Por M. S.
Agencia
AJN.- El Papa Francisco recibió al Congreso Judío Mundial (WJC) en la sala del
Sínodo, emblemático lugar en la vida de la iglesia, con el objetivo de
fortalecer lazos judeo-católicos. Luego de la reunión, se sirvió en el Vaticano
un almuerzo kosher en el que participaron 150 líderes judíos de todo el mundo.
Los judíos y los católicos tienen «en común tesoros espirituales
inestimables», profesan «la fe en el Creador del cielo y de la tierra» y creen
que «el Todopoderoso no permaneció alejado de su creación, sino que se reveló»,
expresó el Papa.
»Sólo con la seria voluntad de acercarse unos a otros y en el diálogo
fraterno es posible preparar el terreno para la paz. Como judíos y cristianos,
hagamos todo lo humanamente posible para detener la guerra y abrir caminos
hacia la paz», añadió Francisco.
A través de la fe y la lectura de las Escrituras, dijo el Sumo
Pontífice, judíos y católicos entran en relación con el Señor y se convierten
en «colaboradores de su voluntad providencial».
En referencia a la luz de la herencia religiosa compartida, el Papa
mencionó que judíos y católicos «ven el presente como un desafío» que los une,
«como una exhortación a actuar juntos». La tarea de estas dos religiones es
«trabajar para que el mundo sea más fraterno, luchando contra las desigualdades
y promoviendo una mayor justicia, para que la paz no sea una promesa del otro
mundo, sino que sea ya una realidad en éste».
Durante el encuentro, el presidente del WJC, Ronald Lauder, lanzó un
proceso colaborativo del que participan más de 200 líderes judíos, en la
confección de un documento conocido como “Kishreinu” (en hebreo, “Nuestra
Relación”), que busca convertirse en la hoja de ruta de las comunidades judías
en la relación con la iglesia católica.
Una vez completado el proceso, “Kishreinu” será presentado públicamente
y actuará como respuesta de la comunidad judía a la Declaración Nostra Aetate
del Concilio Vaticano II, que en 1965 revolucionó la relación entre la Iglesia
Católica Romana y el pueblo judío.
Francisco también se tomó el tiempo para recibir a los líderes del WJC
en el Palacio Apostólico y escuchar las palabras de Lauder. Además, el Papa
saludó personalmente y conversó con los 150 líderes presentes.
Luego del almuerzo con el Sumo Pontífice, en el primer evento formal
realizado por una organización judía en el Vaticano desde la fundación de la
Iglesia Católica, Claudio Epelman, Director Ejecutivo del Congreso Judío
Latinoamericano, señaló en diálogo con la Agencia AJN que
se trata sin dudas »de un punto de inflexión en la relación entre judíos y
católicos que busca profundizar este vínculo y construirlo en un sentido
positivo para poder trabajar juntos y asegurar para nuestros hijos un mundo
mejor del q recibimos de nuestros padres».